Es una pregunta que se escucha con mucha frecuencia y que se pueden obtener muchas respuestas al respecto. La realidad es que no existe un acuerdo entre investigadores que proponen 3 alimentos diarios, y quienes proponen comer entre 5 y 6 veces al día. Un hecho indudable, es que no todas las personas tienen el mismo metabolismo ni las mismas necesidades.
Si partimos del hecho de que el sobrepeso y la obesidad se producen como resultado de un desequilibrio entre la ingestión de alimentos y el gasto de calorías, lo importante no será el número de veces que comamos, sino la carga de calorías de cada comida que realicemos y la actividad física que hagamos.
Acostumbrar a nuestro organismo a un número constante y regular de alimentos reduce la actividad de almacenaje, puesto que no se crean momentos en los que nuestro sistema detecte que no habrá alimento pronto y que por lo tanto, llene las reservas. No obstante, este intervalo regular, puede ser de tres o de cinco alimentos al día.
También debemos tener muy presente que las “comidas fuertes” son el desayuno, la comida y la cena. Y las demás serán “colaciones”, en las que comerás frutas, verduras o algo ligero. Por lo tanto, debes diferenciar si lo que sientes entre un alimento fuerte y otro, es hambre o una simple necesidad de comer algo.
Entre el momento de levantarnos y el desayuno, no es recomendable que pase más de una hora. El siguiente alimento puede ser a la hora de la comida, pero esto puede llegar a ser muy difícil para muchas personas, porque la necesidad de comer es muy fuerte. En este momento es cuando se recomienda hacerse la siguiente pregunta: ¿Es hambre o antojo? Si es hambre, es porque tienes la sensación de tener el estómago vacío; en cambio, cuando tienes en mente qur deseas comer algo en específico, es probable que se trate de un simple antojo. Lo más recomendable es comer cada 4 ó 5 horas para evitar sentir este tipo de sensaciones.
La mejor recomendación es adaptar el número de alimentos a los requerimientos de cada persona. Si se van a realizar colaciones, deben contener alimentos saludables como frutas o vegetales. Reducir al mínimo los alimentos ricos en carbohidratos o grasas, y principalmente distinguir entre hambre y antojo.
También puedes leer