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Como ya es usual, pocas famosas han impactado con sobriedad y elementos llamativos que provocan efectos visuales agradables para la moda en estos MTV Video Music Awards 2014.
Por ahora, la mejor vestida (y de lejos) es Nina Dobrev, con un impactante vestido rojo y negro. La segunda es Gwen Stefani, quien sigue demostrando un impecable sentido de la moda con su traje magenta en bloques de color. Este contrasta con su conocido vestido rubio platino.
Le siguen en la lista Chanel Iman, quien le hace un homenaje al cuero y a los trajes geométricos en Balmain. Luego está Victoria Justice, quien deslumbró con su arriesgada y geométrica falda con cola sobresaliente. Y Lucy Hale no se quedó atrás, ya que se arriesgó con un crop top y una falda bordada. Las dos lucieron acentos en plata y neón, como dicta la temporada.
Ke$ha también sorprende agradablemente al usar un vestido a lo reina de belleza, cosa que ya antes se le ha visto a Lady Gaga en los Grammys y con Versace, pero esta vez la sobriedad se apoderó de la cantante y el toque de excentricidad lo puso en su cabello multicolor. Por la misma tendencia se fue Iggy Azalea con un vestido arquitectónico, que enmarca las formas de su cuerpo.
Por su parte, Jennifer López ya nos tiene acostumbrados a los modelos brillantes que enmarcan su figura (casi siempre de Zuhair Murad), pero no hay que negar que se ve despampanante. De manera contrastante, Miley Cyrus sorprendió con su sobriedad en negro. Mejoró comparativamente, ya que el año pasado, su look de cristales fue muy criticado.
Si se habla de vestidos rojos, que es el color de la temporada, Demi Lovato, a pesar de su escote, lo luce con elegancia.
De igual modo, artistas como Becky G y Ashley Rickards llevaron looks extremos. Una se arriesgó con una falda con taches (debió recogerse el pelo) y la otra llevó un look mucho más conservador.
