Por ahí dicen que los 30 son los nuevos 20. Si eso es cierto, ¡qué divertido! ¿Te imaginas volver a tener 20 años de edad con la experiencia de la de 30 que eres hoy? ¡Cuántas cosas te atreverías a hacer diferentes y cuántas partidas de corazón te hubieras ahorrado! Aunque, claro, no serías la de hoy, ¡sin todos esos tropiezos y arrebatos! Así que mejor a disfrutar de los 30 y sacarle el mejor de los provechos.
Ligar a esta edad de pronto puede ser complicado. Mis pacientes se quejan todo el tiempo. Dicen que los hombres se asustan con las mujeres solteras y treintonas. ¿Por qué? Fácil, porque —probablemente— ya no estás buscando al príncipe azul ni al filósofo chorero ni al hijo de papis que todavía vive con ellos.
A los 30 empezamos a sentirnos seguras con quienes somos, sobre todo si tenemos un trabajo que nos permite ser independientes en el aspecto económico. No necesitamos alguien que nos mantenga, pero sí alguien que nos escuche y quiera compartir sus logros, sus gustos; también sus fracasos y tristezas.
Tal vez sí, como diría un amigo, somos más impacientes. Sentimos que ya no estamos para “perder el tiempo” con cualquiera y le damos next! a la primera de cambio que no nos parece algo de lo que hace.
De acuerdo con mi experiencia, como creemos tener claro qué queremos y estamos en la búsqueda, no nos detenemos con alguien que, desde el principio, ya no cumple con esa expectativa que tenemos tan clara —al menos— en nuestra imaginación.
Sexualmente también tenemos ciertos requisitos: que sea abierto, que no se azote porque yo tenga la misma —o más— experiencia que él, que me tome “en serio” aunque nos acostemos en la primera cita. En fin, que tenga una cierta apertura intelectual y emocional respecto del sexo.
Mientras planeaba este escrito, le pregunté a varias amigas y pacientes cuáles eran las características que no pueden faltar. Se las paso al costo:
1. Presencia.
2. Seguridad en sí mismo.
3. Que sea educado.
4. Sensible.
5. Apasionado.
6. Divertido.
7. Inteligente.
8. Buen escucha.
9. Honesto.
10. Que quiera una relación.
¿Alguna de ustedes se identifica con esta lista? Todo está increíble pero, según mi experiencia profesional y personal, cuando estamos tan seguras de qué queremos, nos perdemos de toda una gama de posibilidades; sobre todo, será difícil dejarnos asombrar y sorprender por la vida.
Si hubiera una regla para después de los 30, sería: “Sé tu, conoce gente, no busques al indicado ; disfruta de todos los equivocados que la vida te ponga; rompe con tus creencias, síguete tropezando y sigue aprendiendo. ¡Esa es la parte divertida de la vida!
Saca de tu cajuela el vestido de novia y devuélvelo al aparador del que lo sacaste… cuando conozcas a alguien y sientas que están listos para dar el siguiente paso y te preocupas por cómo te vestirás el día de tu boda. Quizá te des cuenta que lo tuyo es la unión libre o casarte de rojo en Las Vegas con Elvis.
FRASE
Date permiso de cuestionar tus gustos, tus expectativas y, sobre todo, disfruta de tu soltería mientras la vives. Cada etapa tiene su encanto; no son peor una que otra, son simplemente diferentes.
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