La primavera es la época perfecta para empezar de nuevo y para probar cosas distintas a las de antes. Eso significa que es la temporada ideal para salir de compras. Quizás quieres recompensar algún logro reciente o tal vez tengas un poco de dinero extra que estás lista para gastar.
Sea el caso que sea, la nueva estación podría representar un gran peligro para tus finanzas, ¡a menos de que tengas cuidado! Por eso es importante saber gastar. De hecho, esta guía podría servirte en cualquier ocasión, sin importar la temporada. Piensa en esto antes de sacar la cartera.
Pregúntate
-¿Tengo algo parecido? Lo primero es ser súper honestas y admitir si ya tenemos algo parecido. A veces lo único que queremos es tener algo nuevo, cuando ya tenemos un artículo exactamente igual en el armario o en casa.
-¿Soy adicta a las compras? Ésta es la pregunta más difícil y obviamente no queremos condenar tus hábitos de compras, ¡porque nosotros tenemos los nuestros! Pero tenemos que ver la moda como una inversión. Velo de esta manera: Cuando compras un coche o una casa, no compras otra igual un par de meses después. Haz lo mismo con esos zapatos carísimos o esa bolsa divina que tanto quieres.
-¿Me causará problemas? Si comprar esas botas evitará que puedas pagar el recibo de tu celular, probablemente no sea la mejor idea. Tal vez sea más inteligente ahorrar un poco de dinero cada mes y esperar un rato para hacer esa compra sin nada de culpa.
-Si no tuviera etiqueta, ¿me gustaría? Esto es algo súper difícil, pero es necesario. Si esa bolsa no tuviera las letras LV (Louis Vouitton), ¿de cualquier manera la comprarías? No te dejes llevar por la marca y elige únicamente prendas o accesorios que genuinamente te gusten.
-¿Es una compra impulsiva? Las promociones suelen ser el peor enemigo de nuestras finanzas, ya que intentamos convencernos de que lo necesitamos sólo porque tiene 20% menos, cuando si no tuviera descuento, ni siquiera lo contemplaríamos. La clave se encuentra en saber qué es lo que quieres y esperar a que esté de oferta. Por eso sirve ir a las tiendas solamente a ver y sin gastar nada; así te mantienes al tanto de los precios.
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