Tras 12 horas de inactividad, el desayuno es el encargado de activar el metabolismo y mejorar el rendimiento físico para que comiences con toda la pila, por algo es la comida más importante del día.
Te da energía. Como es el primer alimento que entra en el cuerpo luego de 12 horas de no tener nada en el estómago, proporciona un gran nivel de energía para iniciar nuestras actividades. En esta comida debes integrar lácteos, cereales y frutas.
Mantienes tu peso. Prepárate tus propios menús y le darás a tu cuerpo la estabilidad que necesita para evitar los atracones. Un buen desayuno le aporta los nutrientes indicados para que funcione correctamente, hasta la llegada de la próxima comida. Si te lo saltas, no dudes que en la comida tendrás un hambre feroz y comerás más de lo indicado, te darás un atracón porque así lo está pidiendo tu organismo, de manera que, si no ingieres nada, esta vez tendrá reservas disponibles.
Cuida tu salud mental. El cerebro funciona con la glucosa derivada de los alimentos, por lo que a falta de desayuno no se pueden llevar a cabo las funciones intelectuales, de tal manera que la falta de concentración, desorientación y pérdida de la memoria a corto o largo plazo pueden pasar factura en tus actividades diarias.
También puedes leer