El presidente chino, Xi Jinping, efectuó un inusual paseo por una zona turística de la capital china, una aparición que parece responder a las críticas de los ciudadanos por la persistente contaminación en la capital.
El presidente chino caminó acompañado de cámaras de televisión por la calle Nanluoguxiang, una zona turística constituida de casas tradicionales chinas y que se encuentra en pleno centro.
En las imágenes se ve a Xi saludando a los locales, en un fondo marcado por la alta contaminación en el aire que azota la ciudad desde hace una semana.
Más de 140 industrias situadas en Pekín han suspendido o reducido su actividad productiva la última semana, en un intento por reducir la contaminación en la ciudad que provocó el pasado viernes declarar la alerta naranja.
Ello se produce apenas tres días después de que el presidente chino fuera visto en un restaurante popular de la capital, donde se puede comer por apenas dos dólares, y él mismo pidió su comida y la llevó en una bandeja hasta su mesa.
Estas dos apariciones han provocado múltiples comentarios en Internet de ciudadanos que se congratulan de que Xi sea un presidente que se quiere acercar al pueblo, mientras otros critican que se trate de una mera estrategia de propaganda.
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