Olas de hasta 8.2 metros de altura fustigaron este lunes la costa sudoccidental de Gran Bretaña, cuando fuertes vientos e intensas lluvias azotaron partes del país y residentes de zonas costeras se preparaban para más inundaciones.
Las olas más grandes se registraron en Land’s End, el extremo suroeste de Gran Bretaña.
En Aberystwyth, Gales; casas costeras, negocios y dormitorios estudiantiles fueron evacuados a causa de la marea alta.
La agencia meteorológica británica advirtió de vientos de hasta 113 kilómetros por hora (70 (mph) y olas excepcionalmente grandes a lo largo de las costas de Gales, el suroeste de Inglaterra e Irlanda del Norte.
Dijo que la tormenta está relacionada con un sistema de tormentas que causó una helada que arrojó enormes volúmenes de nieve en el nordeste de Estados Unidos, obligando a la cancelación y retraso de numerosos vuelos.
“Una corriente a chorro muy fuerte hizo desplazarse un área de bajas presiones por el Reino Unido”, dijo el meteorólogo Charles Powell.
Al menos siete personas han muerto en una serie de tormentas que han vapuleado Gran Bretaña desde diciembre. La agencia ambiental emitió tres alertas de inundación severa el lunes, lo que significa que existe peligro para vidas y propiedades, para el condado de Dorset, en el sur de Inglaterra, además de 300 alertas menos graves.
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