La Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) confirmó que la tarde de este jueves fue localizado el cuerpo de Sergio González Ibarra, uno de los guaruras de Alberto Sentíes, mejor conocido como Lord Ferrari, en un hotel del municipio de Atizapán de Zaragoza, Estado de México, donde presuntamente también fue hallada una carta con su declaración sobre los hechos del pasado 11 de marzo.
«Él dio la orden de golpearlo y cuando ve que lo graban me dice que ya lo deje», relata en la carta sobre la agresión a un ciudadano que quedó registrada en video.
Además revela que tras el incidente Sentíes lo obligó a renunciar a la empresa Jess, «me dijo no tengas miedo , todo lo tengo arreglado y vea, nada arregló, sólo me empinó a mi».
La PGJDF detalló que según la necropsia de ley, el guarura murió de un infarto al miocardio, aunque este informe tendrá que ser corroborado por las pruebas de ADN y la toma de huellas dactilares, así como análisis pericial de grafoscopía.
Apenas el 16 de marzo, el juez Primero de Distrito de Amparo en Materia Penal en la Ciudad de México concedió una suspensión provisional a Alberto Sentíes Palacios, para evitar su detención.
Luego que autoridades de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal llevaran a cabo la búsqueda de Santíes Palacios, para que explicara los motivos por los que uno de sus escoltas golpeó a un automovilista, le robó y causó lesiones, el inculpado buscó el amparo.
El amparo que obtuvo es contra actos privativos de la libertad, particularmente contra cualquier orden de presentación, detención o retención por la Procuraduría capitalina y el juez le concedió la suspensión provisional, y le fijó una garantía de mil 500 pesos.
Acompañado de su abogado y chofer, el acusado acudió por su propia cuenta a la Coordinación Territorial 3 de la Fiscalía de Tlalpan para rendir su declaración.
El testigo entregó el expediente con los datos personales del elemento de seguridad que ahora enfrenta una acusación por los delitos de lesiones y robo, ambos considerados graves en el Código Penal.
En su vivienda fueron localizados el automóvil Ferrari color rojo y el vehículo en el que viajaba el escolta agresor, un Dodge Charger último modelo; ambos automotores fueron puestos a disposición del Ministerio Público.
