El aficionado que atrapó la pelota del jonrón que permitió a los Gigantes de San Francisco pasar a la Serie Mundial, le regresó la bola al guardabosques Travis Ishikawa, quien la mandó a las gradas.
Frank Burke declaró que quien merece tener la pelota es Ishikawa, quien la mandó sobre la barda.
El jueves Ishikawa conectó un batazo de cuatro esquinas por todo lo alto del jardín derecho en el noveno episodio con dos corredores por delante para definir el triunfo de los Gigantes por 6-3 contra los Cardenales de San Luis.
La victoria producida por Ishikawa dejó la serie 4-1 y permitió a los Gigantes conseguir el título de la Liga Nacional para disputar el Clásico de Otoño contra los Reales de Kansas City a partir del martes.
Ishikawa, en agradecimiento, le dio a Burke, dueño de un negocio de reparación de transmisiones, un bate firmado.
Burke decidió regresar la pelota aunque no se le concedieron los boletos para asistir a la Serie Mundial que había pedido.
Poco después Burke recibió una llamada de las oficinas de los Gigantes, quienes le concedieron cuatro boletos para el tercer juego de la serie, que se jugará en el AT&T Park, el viernes.
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