“Firmaría perder los tres clásicos a cambio de ser campeón”, había dicho Ricardo Peláez la semana pasada. Aunque las Águilas decepcionaron a su afición contra Cruz Azul, Pumas y Chivas, el América ya ha sido campeón sin haberle ganado a sus tres máximos rivales.
En la fase regular del Verano 2002, América empató 0-0 con Pumas, perdió 2-0 ante Cruz Azul y también cayó contra Chivas, por marcador de 3-2. En la final de ese torneo, se impuso a Necaxa con global de 3-2 gracias al gol de oro de Hugo el “Misionero” Castillo.
En la liguilla, América sí pudo ganar un clásico, ya que se enfrentó a Pumas en semifinales y les ganó 2-1 en el partido de vuelta celebrado en Ciudad Universitaria.
En aquel lejano 2002, las Águilas de Manuel Lapuente clasificaron “de rebote” como octavo lugar de la tabla general y en cuartos de final eliminaron al sorpresivo líder La Piedad.
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