Los testimonios en el juicio por asesinato a Oscar Pistorius se centraron en el martes en una de las bases de la tesis de la acusación: los gritos que oyeron los vecinos la noche en la que el atleta mató a su novia, Reeva Steenkamp.
El fiscal jefe, Gerrie Nel, interrogó a un experto en acústica citado por el equipo de la defensa como parte de su estrategia para sugerir que los vecinos que dijeron haber oído los gritos de una mujer se equivocaban, y que en realidad oyeron los agudos gritos del corredor, que tiene las dos piernas amputadas.
Varios vecinos citados por la fiscalía testificaron que oyeron gritar a una mujer aterrorizada la noche en la que Pistorius mató a Steenkamp, lo que podría reforzar el argumento de la acusación de que la pareja estaba discutiendo antes de que Pistorius abriera fuego. La defensa ha sugerido que los gritos los profirió Pistorius cuando se dio cuenta de que había disparado a Steenkamp por error.
El deportista disparó a Steenkamp a través de una puerta de baño cerrada en su casa, en la madrugada del 14 de febrero de 2013. Él testificó que disparó en la creencia errónea de que había un intruso peligroso en su casa. La fiscalía alegó que Pistorius mató a su novia tras una discusión del día de San Valentín.
El experto en acústica, Ivan Lin, testificó que hizo pruebas que mostraban que el ruido ambiental y otros factores pueden complicar escuchar con precisión desde la distancia.
Pistorius podría ser condenado a un máximo de 25 años de cárcel si se le declara culpable de asesinato premeditado. También podría ir a prisión si se le condena por asesinato sin premeditación o por homicidio imprudente. Está libre bajo fianza.
El lunes, el tribunal recibió informes de expertos en salud mental que concluyeron que el atleta no sufría una enfermedad mental cuando mató a Steenkamp, y podía comprender lo erróneo de lo que había hecho. Los informes se realizaron durante un mes de pruebas en un hospital psiquiátrico estatal.
FOTOS: Mascotas de Brasil 2014 en anime