Veracruz organizará el próximo mes de noviembre los Juegos Centroamericanos y del Caribe, pero ante la ola de violencia un movimiento estudiantil amenazó con boicotear la justa deportivo a manera de repudio.
Antes esta situación recordamos algunos eventos deportivos que fueron amenazados de ser boicoteados, que fueron afectados por protestas o que no contaron con la participación de algunos países.
Uno de los casos más sonados se dio en los Juegos Olímpicos de Moscú 1980, cuando Estados Unidos no participó, por orden del presidente Jimmy Carter, en respuesta a la invasión rusa a Afganistán. Pese a esto, el evento se realizó con cierta normalidad y los anfitriones fueron los grandes triunfadores.
En Los Angeles 1984, La URSS y las repúblicas soviéticas le devolvió la “cortesía” a Estados Unidos al no asistir a los Juegos Olímpicos, lo que le restó competitividad al evento.
Los Juegos Olímpicos de Invierno de 2014, que se llevaron a cabo en Sochi, fueron amenazados de ser boicoteados por varios países de la Unión Europea, entre ellos Alemania, debido a las estrictas políticas de Rusia contra la homosexualidad. Al final, todas las delegaciones se presentaron a participar.
Uno de los eventos deportivos más polémicos fuero los Juegos Olímpicos de Berlín 1936. Si bien Hittler no estaba en el poder cuándo la capital alemana ganó la sede, sí recibió críticas por terminar organizando los juegos. España no asistió al torneo y decidió organizar unos Juegos populares paraleos, que al final no se llevaron a cabo por el golpe de estado del general Francisco Franco.
Además, Jesse Owens representó el sentimiento anti nazismo al ganar el salto de longitud al alemán Lutz Long. En el podio, el estadounidense se dio un abrazo con Long, mientras que Hitler abandonaba el estadio.
Otro hecho que ensombreció a unos Juegos Olímpico fue el de Munich 1972, cuando Septiembre Negro, un grupo terrorista palestino, secuestró y asesinó a 11 deportistas israelíes.
La España franquista también boicoteó los Juegos de Melbourne de 1956, por la invasión de la URSS a Hungría.
Seúl 1988 estuvo a punto de sufrir un boicot, pero Rusia y otros países socialista decidieron asistir a la justa olímpica, pese a no tener relaciones diplomáticas con Corea del Sur.
El Mundial de Futbol de 2018 se realizará en Rusia y desde ahora se ha llamado a boicotear el principal torneo del balompié tras la crisis que existe entre Ucrania y los futuros anfitriones.
Un situación similar se está dando con el Mundial de Qatar 2022, pero con la diferencia de que los países europeos piden que no se juegue el torneo ahí por las extremas condiciones climáticas. Aunque la FIFA ha declarado que no se cambiará la sede, las federaciones occidentales no dejarán de reclamar el hecho.
La Copa Confederaciones de Brasil también vivió momentos de tensión cuando gran parte de la población brasileña protestó por el evento y por el Mundial de 2014, por las corrupción y los gastos excesivos que destinó el país sudamericano pese a que tiene problemas más graves tanto sociales como políticos.
A parte de lo que puede suceder en los Juegos Centroamericanos de Veracruz, México ya vivió situaciones comprometedoras con otros eventos deportivos. Los Juegos Olímpicos de 1968 estuvieron marcados por la tragedia del ‘2 de octubre’ por la matanza de Tlatelolco.
Los juegos se disputaron bajo la tensión de un problema estudiantil que puso en jaque a un gobierno autoritario. Sumado a esto se dio la protesta de los estadounidenses Tommie Smith y John Carlos, medallistas de oro y bronce respectivamente en los 200 metros, levantaron el puño envuelto en un guante negro en un saludo denominado “del poder negro”.
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