La inseguridad en Brasil ha sido un tema muy vigilado por parte de las autoridades locales, algo que han buscado controlar dentro de los estadios de la Copa del Mundo Brasil 2014 sin éxito total, ya que en diferentes inmuebles se han registrado robos, principalmente de equipo fotográfico.
Los reporteros gráficos han sido muy golpeados en esta competencia desde antes de que comenzara, pues en la ciudad de Santos, sitio donde estuvo el cuartel general de la selección de México, un fotógrafo salvadoreño de una agencia internacional sufrió el robo de todo su equipo, pertenencias personales y dinero, todo sustraído de su habitación del hotel.
Entre los fotógrafos se maneja que en la Arena de Sao Paulo se han registrado robos de equipo en las salas de prensa, así como en el Estadio Maracaná, donde han sido sustraídos sin que nadie tenga idea de cómo sucedió. Incluso, el Comité Organizador envió a los fotógrafos una circular en la cual les pedían que hicieran uso de los lockers que se encuentran en las salas de prensa, aunque sin aceptar los hechos registrados.
El problema es que también ha trascendido que tampoco es tan seguro, porque algunos habrían sido abiertos y robado todo lo que estaba en su interior. Durante el partido de octavos de final entre México y Holanda el caso fue más grave, ya que en el terreno juego a un fotógrafo le robaron una cámara y un lente de largo alcance, el cual le había sido prestado por una de las firmas fotográficas que brindan apoyo en ese sentido.
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