El promotor Bob Arum quiere enviarle un mensaje al precandidato presidencial republicano Donald Trump con una cartelera preliminar plenamente de boxeadores hispanos en su próxima función de pago por ver que será el 9 de abril cuando Manny Pacquiao enfrente a Tim Bradley.
Arum señaló que pautará solo a boxeadores hispanos en los combates preliminares al tercer enfrentamiento estelar en Las Vegas.
Arum la describió como la «cartelera de Donald Trump».
El promotor está en desacuerdo de las propuestas del precandidato presidencial para que se construya un muro en la frontera México-Estados Unidos y la deportación de aproximadamente 11 millones que entraron al país sin autorización.
«Quiero que sepan que hay mucha gente que están con ellos y que no permitirán que los deporten», dijo Arum. «Y si Trump es elegido, saldré a la calles para protestar junto a ellos».
Arum, quien estudió en la Universidad de Harvard, tiene un largo historial en el que se ha involucrado en la política y a la par del boxeo, remontándose a sus primeros días en el deporte como promotor de Muhamad Ali.
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También es consciente que la población de origen mexicano en Estados Unidos es la columna vertebral de su deporte, y las empresas cerveceras de México suelen ser los principales patrocinadores de sus megapeleas sin importar que un mexicano no sea protagonista.
Entre el talento hispano que podría intervenir en la programación preliminar de Pacquiao-Bradley en la MGM Grand Garden Arena está el pluma mexicano Oscar Valdez; el mediano mexicano Gilberto Zurdo Ramírez; y José Ramírez, un hijo de padres mexicanos que representó a Estados Unidos en los Juegos Olímpicos de Londres 2012.
Antes que Arum, de 84 años, incursionara en el boxeo, fue abogado en el Departamento de Justicia en los gobiernos de John F. Kennedy y Lyndon B. Johnson.
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