Serbia se proclamó el sábado campeona del Mundial Sub-20 gracias a un tanto de Nemanja Maksimovic a los 117 minutos que culminó una sorprendente victoria del combinado europeo por 2-1 sobre Brasil, una de las favoritas al levantar la copa en Nueva Zelanda.
El partido parecía destinado a la tanda de penales, hasta que un contraataque tardío de Serbia dio sus frutos. Stefan Ilic y Andrija Zivkovic trenzaron una jugada para habilitar a Maksimovic por detrás de la defensa y el centrocampista remató con calma un pase raso que superó al arquero brasileño Jean.
La victoria, el primer título de Serbia desde su independencia en la década de 1990, es obra en gran parte del guardameta Pedrag Rajkovic, que realizó una serie de atajadas con las que impidió el ansiado triunfo de Brasil.
“Les digo que tuvimos suerte”, dijo el técnico serbio Veljko Paunovic. “Pero la suerte es parte del juego y hay que merecerla. Al fin y al cabo creo que la copa fue para el equipo que más quería ganar, y fuimos nosotros”.
Brasil llegó a la final con 502 minutos de arco invicto, pero eso se acabó a los 70 minutos, cuando Stanisa Mandic convirtió tras un centro de Maskimovic al segundo palo para dar la ventaja a Serbia.
Dos minutos después, Brasil logró el empate por intermedio de Andreas Pereira, quien tras superar a varios defensores con sus regates definió con un estupendo remate. A partir de entonces, Brasil dominó el encuentro y Rajkovic se convirtió en la figura de su equipo.
La “próxima generación” del futbol brasileño buscaba su sexta corona mundial sub-20. Antes del partido, el mediocampista Gabriel Boschilia dijo que el equipo intentaba “restaurar la imagen del fútbol brasileño” tras la humillante derrota de la selección mayor por 7-1 frente a Alemania en las semifinales del Mundial 2014.
“El mundo perdió un poco de respeto por los jugadores de nuestro país después de lo que sucedió en el Mundial 2014, así que queremos demostrar que todavía podemos dar mucho”, dijo.
El técnico brasileño Rogerio Micale consoló individualmente a sus jugadores después del partido y los exhortó a no cejar en la tarea de reconstruir el fútbol brasileño.
“Creo que dieron un ejemplo hoy y durante todo este torneo con lo que hicieron y con su profesionalismo”, dijo Micale. “Estoy muy orgulloso de este equipo. Son una gran generación y estaré orgulloso cuando jueguen en la selección mayor”.
En el partido por el tercer puesto, bajo una lluvia torrencial, Mali venció a Senegal 3-1 en tiempo adicional.
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