El Super Bowl del domingo logró un récord de audiencia con 114.4 millones de telespectadores y se convirtió en el programa más visto en la historia de Estados Unidos, informó la cadena NBC, encargada de la transmisión.
La final de la Liga Nacional de Futbol Americano Profesional (NFL), que en ésta ocasión se definió en forma dramática en la última jugada para los Patriotas de Nueva Inglaterra 28 puntos contra 24 de los Halcones Marinos de Seattle, superó en 2.2 millones el record del año pasado.
El punto más alto de la audiencia llegó a 120.8 millones de telespectadores durante el último cuarto del juego, en el que el mariscal de campo de Patriotas, Tom Brady, lanzó tres pases para ponerse adelante en el marcador.
Los Patriotas remontaron una desventaja de 10 puntos en el cuarto final vencer a los Halcones Marinos en el duelo disputado en Glendale, cerca de Phoenix, Arizona.
De acuerdo con los datos medidos por la firma Nielsen, un 49.7 de los hogares que observaban el televisor sintonizó el partido en un momento en la noche, el mejor promedio desde el Súper Tazón de enero de 1982, de 49.1 cuando los 49’s de San Francisco vencieron a los Benaglies de Cinncinatti.
“Esto demuestra que el Super Bowl es el producto televisivo más dominante y consistente”, dijo en un comunicado Mark Lazarus, presidente del grupo NBC Sports.
El espectáculo musical de medio tiempo a cargo de Katy Perry, también batió un récord histórico con 118.5 millones de telespectadores, tres millones más que los 115.3 millones que en 2014 observaron al cantante Bruno Mars.
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