Las selecciones de México y Croacia se jugaban el pase a la siguiente ronda en la tercera fecha del Grupo A, del Mundial de Brasil 2014. No había lugar para los dos, solo uno podría estar en octavos de final.
En la tensión del encuentro se encararon el delantero croata Nikica Jelavic y el azteca Rafa Márquez. El ofensivo europeo sin más le dijo al capitán del Tri: “puto”, un término que en el vocabulario mexicano se puede interpretar como una ofensa.
El insulto del croata llegó días después de que la FIFA asegurara que abriría una investigación por los gritos de la afición del Tricolor, que se pueden interpretar como homófobos. Los hinchas mexicanos gritan aquella palabra cuando el arquero rival despeja un balón.
Al final, México venció 3-1 a los europeos y el órgano rector del futbol aseguró que no sancionará a México, pues el grito “no se considera un insulto en este contexto”.