Ryan Lochte y otros tres nadadores estadounidenses fueron asaltados por hombres armados que detuvieron el taxi en que viajaban, confirmó el Comité Olímpico de Estados Unidos el domingo.
Patrick Sandusky, vocero del Comité, detalló que el grupo de atletas abandonó la casa del equipo olímpico francés a bordo de un taxi la madrugada del domingo para dirigirse a la villa de los atletas, horas después del final de las competencias de natación en los Juegos de Río.
Sandusky explicó que «el taxi fue detenido por individuos armados que se hicieron pasar por policías, quienes exigieron a los nadadores dinero y otras pertenencias personales».
Sandusky agregó que los cuatro nadadores se encuentran «a salvo y cooperan con las autoridades».
USA Today y Fox Sports Australia reportaron inicialmente el hecho, citando a la madre de Lochte, Ileana Lochte.
La madre de Lochte, Ileana Lochte, y el representante del atleta no respondieron de momento a las llamadas telefónicas y mensajes de texto de The Associated Press.
Mario Andrada, vocero de los organizadores de los Juegos de Río, explicó que ha sido informado brevemente sobre «un asunto» que involucra a un nadador, pero no podría decir que se trató de un asalto a mano armada.
Lochte compitió en dos eventos en las justas de Río, obteniendo el oro en los relevos estilo libre 4×200 de hombres.
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