La muerte de uno de los integrantes del grupo musical Il Divo, Carlos Marín, ha creado un gran escándalo entre los fanáticos del barítono, con muchos de ellos asombrados y entristecidos por su repentino fallecimiento. A propósito de esto, también ha salido a relucir la gran cantidad de dinero que el famoso cantante logró amasar en vida, siendo esta una gran suma que es equiparable con su trayectoria musical.

El cantante conocido por tener una de las voces más potentes de la actualidad, falleció el pasado 19 de diciembre en el centro médico Manchester Royal de Inglaterra después de que se informara sobre su estado de gravedad que lo llevó a permanecer en coma inducido por varios días.

El patrimonio que dejó Carlos Marín

A través de la información suministrada por el portal Celebrity Net Worth que se especializa en tasar la fortuna neta de las celebridades, se dio a conocer que a propósito de la muerte de Carlos Marín, su patrimonio se ubica alrededor de los 20 millones de dólares, unos 17.707.700 millones de euros, con exactitud.

De acuerdo con el portal, el integrante de Il Divo administró tres empresas que giraban en torno al mundo artístico en el cual él mismo se desenvolvía.

La primera de ellas, Espectáculos Tercer Milenio S.L, que se fundó en 1999,la cual inicialmente era de su madre, Magdalena Menchero, en 2002 pasó a serlo el propio Carlos. Esta tiene como objetivo la representación de artistas, entre ellos Innocence, también conocida como Geraldine Larrosa, quien fue exesposa del cantante fallecido.

Luego, en 2007 fundó Trapp Entertainment S.L de la cual no hay muchos registros sobre su actividad comercial. Finalmente, en el 2019, Carlos Marín creó la empresa Opera Diamond SL, de la que es administrador único.

Una propiedad más íntima

Si bien el artista pasaba la mayor parte de su tiempo de gira con Il Divo, igualmente tenía su residencia principal en Madrid, España. Esta ha figurado varias veces en redes sociales, mostrando una opulenta decoración y un gran terreno que incluye una piscina.

En el interior se podían ver todo tipo de recuerdos que Carlos coleccionaba de sus giras por varios países. También reflejaba su pasión por la música mostrando un gran piano, además de un gimnasio casero. Como bono adicional, la vista que tenía la residencia al paisaje madrileño le daba un aire sofisticado a la propiedad.

El activo más productivo: su voz

Si bien Carlos Marín tiene tres empresas y una vivienda que elevan su patrimonio, la principal fuente de ingresos del cantante estaba basada en su talento para las artes artísticas, específicamente con la música ya que desde muy pequeño estuvo involucrado en todo tipo de proyecto que lo llevaron al mundo del espectáculo.

Desde que tenía ocho años, el barítono consiguió varios papeles en obras teatrales musicales que lo irían preparando para un futuro brillante en el mundo del espectáculo. Años más tarde también incursionaría en otros proyectos individuales pero sin conseguir mucho éxito.

Pero todo cambió en 2004, cuando el gran productor musical Simon Cowell, famoso por ser un rudo jurado en America’s Got Talent y American Idol, tuvo la idea de juntar a cuatro cantantes con diferentes rangos vocales para crear un grupo de música basado en la ópera pero con un estilo contemporáneo.

Fue a partir de ese momento que Carlos Marín junto a sus compañeros Urs Bühler, Sébastien Izambard y David Miller, fueron consiguiendo el éxito paulatinamente con Il Divo, con nueve álbumes en su haber y con más de 40 millones de copias vendidas alrededor del mundo.

El grupo musical es famoso por sus dos colaboraciones con la cantante Toni Braxton en “Regresa a mi” y “Time of our Lives”, siendo está última canción uno de los himnos de la Copa Mundial de la FIFA de 2006 celebrada en Alemania. También se encargaron de interpretar el tema de apertura de la telenovela mexicana de 2009, Sortilegio.

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