Los reiterados problemas en los que se ha visto involucrado Alfredo Adame han sido noticia. El último y quizá uno de los más fuertes, fue la golpiza que le dieron unos sujetos en la cercanía de su casa. Tras eso hecho tuvo que ser internado en un hospital y someterse a una cirugía de cara para colocarle 4 placas de platino.
Mientras se recupera, el actor de 67 años de edad se encuentra en una batalla legal en contra del periodista Carlos Jiménez, quien difundió las imágenes donde se ve el momento de la agresión hacia el ex conductor del programa HOY, quien según dijo, salió agredido por intentar defender a una persona.
“Ya están presentadas, supongo que ya entre ayer y hoy, mis abogados ya presentaron una denuncia penal en contra de ‘c4jiménez’, que es un cuate de muy mala fama, que se sabe que trabaja con bandas y que chantajea gente por medio de los videos. No es periodista, no tiene cédula profesional, es un vago y nada más con eso les digo todo’', señaló Alfredo Adame.
Este no sería el primer pleito donde se le relaciona a Adame, en lo que va de año se ha visto involucrado en otras dos peleas una de ellas con el periodista Gustavo Adolfo Infante y el abogado de su archi enemigo el periodista Carlos Trejo.
¿Qué lo hace involucrarse en tantos pleitos?
Recientemente su ex esposa Mary Paz Banquells fue abordada por los periodistas, al ser consultada sobre las constantes riñas donde se le relaciona al padre de sus hijos dijo que esa es su naturaleza.
“Así es él, así ha sido y así es, y le gusta todo eso. Es que cuando te gusta estar metido en broncas, siempre está. Yo estoy muy tranquila, mis hijos también así que hay que saber vivir en paz”, precisó.
“Que bueno que ya salió bien y no salió con todos los daños”, preció Mary. Afirmó que sus hijos; Diego, Alejandro y Sebastián, no se han acercado a su padre con quien están distanciados desde el momento de su separación y posterior divorcio.
Paz Banquells, estuvo casada con Alfredo durante 20 años, dijo que también fue víctima de violencia y esa fue la razón de su separación y posterior divorcio. Desde entonces se ha encargado de cuestionarlos al punto de sugerir que les quitaría el apellido.