SOFÍA, 16 (DPA/EP)
Cientos de personas han vuelto a manifestarse durante la noche de este miércoles en la capital de Bulgaria, Sofía, para reclamar de nuevo la dimisión del primer ministro, Boiko Borisov, a pesar de que el mandatario avanzó horas antes que no renunciaría a su cargo.
Los manifestantes, que han salido por séptima noche consecutiva, acusan al Ejecutivo búlgaro de corrupción y comportamiento mafioso. Cuentan con el apoyo de los opositores socialistas y del presidente, Rumen Radev. Además, se han extendido hacia otros puntos del país, como las ciudades de Varna y Burgas.
En este contexto, los socialistas han presentado este miércoles una moción de censura contra el Gobierno en el Parlamento búlgaro, acusando al Ejecutivo de Borisov de corrupción. El primer ministro ha sobrevivido a varias de estas mociones desde que asumió el cargo, en 2017.
Al tiempo que Borisov ha rechazado dimitir, ha pedido la renuncia del Interior, Finanzas y Economía, Mladen Marinov, Vladislav Goranov y Emirl Karanikolov, respectivamente, tras una reunión con coordinadores regionales de su partido, Ciudadanos por el Desarrollo Europeo de Bulgaria (GERB). Los ministros habrían expresado su disposición a dimitir y habrían comunicado que lo harán durante la jornada del jueves.
Borisov ya avanzó durante el fin de semana que permanecería en el cargo. Las próximas elecciones están previstas para marzo de 2021.