El probable nuevo canciller de Alemania, Olaf Scholz, anunció el lunes que un epidemiólogo que ha sido una destacada voz de prudencia en la pandemia del coronavirus será el nuevo ministro de Salud, dentro de un equipo que incluye a la primera mujer en el puesto de seguridad de mayor rango del país.
Scholz presentó a los candidatos al gobierno de su partido, los socialdemócratas de centroizquierda, horas antes de que los posibles socios del nuevo gobierno, los Verdes, anunciaran si sus militantes habían aprobado la nueva coalición a tres bandas en una votación.
Eso abriría camino para que el parlamento eligiera el miércoles a Scholz, después de que las convenciones socialdemócrata y liberaldemócrata respaldaran el acuerdo durante el fin de semana. Su nombramiento pondría fin a los 16 años de mandato de la canciller saliente, Angela Merkel.
El nombramiento que más expectación despertaba era el del ministro de Sanidad, ya que Alemania está teniendo problemas para combatir su tasa de contagios de coronavirus más alta desde que comenzó la pandemia. Scholz escogió a Karl Lauterbach, un legislador epidemiólogo y con habilidad comunicativa que no tiene experiencia de gobierno pero ha sido una de las voces más destacadas en Alemania para pedir prudencia y medidas estrictas contra el covid-19 desde que comenzó la pandemia.
“La pandemia está lejos de haber terminado”, dijo Scholz, alegando que “la mayoría de la gente en este país desde luego quería que el próximo ministro de salud fuera un especialista que pueda hacerlo bien, y que se llamara Karl Lauterbach”.
Líderes federales y estatales anunciaron la semana pasada nuevas restricciones dirigidas principalmente a las personas sin vacunar. En una medida más a largo plazo, el parlamento estudiará imponer la vacunación general.
Cuando se le preguntó por la perspectiva de Navidad, Lauterbach dijo que “un objetivo importante debe ser reducir el número de casos hasta que podamos recomendar los desplazamientos sin poner en peligro a la gente”.
Cuando anunció sus elegidas para Defensa e Interior, Scholz dijo que “la seguridad estará en manos de mujeres fuertes en este gobierno”.
Nancy Faeser, una abogada que lidera la rama del partido en el estado central de Hesse, fue una elección inesperada como la primera ministra del Interior de Alemania, un puesto que incluye supervisar los cuerpos policiales y la agencia de inteligencia interior. Faeser dijo que una de sus prioridades sería combatir el extremismo de ultraderecha, que describió como “la mayor amenaza” para el país.
La ministra saliente de Justicia, Christina Lambrecht, se convertirá en la nueva ministra de Defensa.
Klara Geywitz, socialdemócrata veterana del este de Alemania y que fue la compañera de Scholz en un intento fallido de liderar el partido en 2019, dirigirá el recién creado Ministerio de Construcción. La ministra saliente de Medio Ambiente, Svenja Schulze, se convertirá en ministra de Desarrollo Internacional. El ministro de Empleo, Hubertus Heil, permanecerá en el puesto.
El jefe de gabinete de Scholz será Wolfgang Schmidt, antiguo confidente del próximo mandatario y que fue su viceministro de Finanzas en el gobierno saliente.
Los Verdes y los Liberal Demócratas ya han nombrado a sus ministros. El vicecanciller de Scholz será Robert Habeck, uno de los colíderes de los Verdes. Dirigirá un Ministerio de Economía y Clima, una nueva combinación. La otra colíder de los Verdes, Annalena Berbock, se convertirá en la primera ministra alemana de Exteriores tras liderar la primera campaña de su partido a la cancillería en las elecciones de septiembre.
El líder de los liberaldemócratas, Christian Lindner, se convertirá en ministro de Finanzas y en el número 3 del nuevo gobierno.
Scholz había prometido un gabinete con paridad de género, y así es, si no se cuenta al canciller. Las elecciones dentro de su partido, afirmó, reflejan el hecho de que las mujeres deben “tener la mitad del poder”.