CHICAGO (AP) — Las autoridades de Chicago cancelaron clases por cuarto día en el tercer distrito escolar más grande de la nación debido a que las negociaciones con el sindicato de maestros sobre la instrucción a distancia y otros protocolos de seguridad sobre el COVID-19 no redituaron un acuerdo el fin de semana.
La alcaldesa Lori Lightfood y el director general de las Escuelas Públicas de Chicago, Pedro Martinez, dijeron el domingo en la noche en un comunicado conjunto que no había “progreso suficiente” en las conversaciones para reanudar el lunes las clases presenciales, debido a lo cual la interrupción se amplía a una segunda semana escolar. Sin embargo, anunciaron que las negociaciones continuarían “durante la noche”.
Los puntos en discrepancia incluyen pruebas y parámetros. El sindicato de Maestros de Chicago (CTU por sus siglas en inglés) desea la opción de volver a la enseñanza a distancia en todo el distrito, y la mayoría de sus miembros se han rehusado a dar clases presenciales hasta que haya un acuerdo o una baja en el pico más reciente de casos de COVID-19.
Sin embargo, las autoridades rechazan la enseñanza a distancia en el distrito porque, aseguran, perjudica a los estudiantes, y las escuelas son seguras. Entonces, Chicago optó por cancelar las clases dos días después de que los alumnos regresaran de las vacaciones de invierno.
Chicago enfrenta los mismos problemas de la pandemia que otros distritos a nivel nacional y han aumentado los que han reanudado la enseñanza a distancia al tiempo que aumentan las infecciones y miembros del personal quedan marginados. Sin embargo, la situación aquí, donde el sindicato tiene gran apoyo, ha crecido a una disputa laboral conocida para las familias en el distrito —principalmente de personas negras y latinas de bajos ingresos_, que ya conocen este tipo de interrupciones como ocurrió durante una disputa similar sobre protocolos de seguridad el año pasado, una huelga en 2019 y una paralización de actividades de un día en 2016.
El anuncio para el distrito de aproximadamente 350.000 alumnos tuvo lugar en momentos en que los directores de algunas escuelas ya habían notificado a las familias que sus escuelas estarían cerradas el lunes debido a escasez de personal.
El tono del comunicado de Lightfoot y Martinez dejaba entrever mayor progreso que el día antes, cuando poco después de que el sindicato presentara su más reciente propuesta, dijeron: “Dirección del CTU, no están escuchando” y se comprometieron a no “ceder”. La propuesta rechazada por la alcaldesa incluía que los maestros se presentaran el lunes en las escuelas a fin de distribuir laptops para que a partir del miércoles comenzaran de manera temporal las clases a distancia. Ambas partes han presentado quejas ante la junta laboral del estado.