MADRID, 17 (EUROPA PRESS)
Los organizadores de los Juegos Olímpicos de invierno que acogerá Pekín en febrero no pondrán entradas a disposición del público por la «complicada» situación relativa a la pandemia de la COVID-19, después de que este fin de semana la capital china haya confirmado sus primeros casos de la variante ómicron del coronavirus.
El comité organizador se limitará a repartir entrada entre autoridades, teniendo en cuenta además que los asistentes a las competiciones deberán respetar unas estrictas medidas de seguridad, tanto antes como después de las citas deportivas, según la agencia de noticias DPA.
Pekín sigue así la estela de Tokio, que ya restringió las visitas de espectadores internacionales para los Juegos Olímpicos del pasado verano. Además, en este caso se ha establecido una estricta burbuja para que los deportistas internacionales no entren en ningún momento en contacto con la población local y sean sometidos a PCR diarias.
China ha mantenido una política de cero casos frente al virus, lo que se ha traducido en medidas radicales a la mínima aparición de un brote, pero esto no ha evitado que se hayan detectado casos comunitarios de ómicron en al menos una quinta parte de las provincias. Los Juegos Olímpicos y el Año Nuevo chino, que coinciden en febrero, hacen temer un repunte.
El Ministerio de Sanidad ha notificado en las últimas 24 horas otros 163 contagios comunitarios, según la prensa oficial. La ciudad de Tianjin, en el norte, es uno de los principales epicentros actualmente, lo cual preocupa no sólo desde el ámbito sanitario sino también desde el económico, ya que es un punto de paso clave de suministros.