EL CAIRO (AP) — El comisionado de relaciones exteriores de la Unión Europea denunció el martes que el gobierno militar de Sudán no ha demostrado voluntad de llegar a una solución pacífica a la crisis política actual, luego que fuerzas de seguridad dispararon contra una protesta en la capital Jartum, donde murieron por lo menos siete personas.
En todo Sudán, el movimiento por la democracia ha lanzado una campaña de desobediencia civil en protesta por las muertes ocurridas el lunes.
Más de 70 personas han perdido la vida y muchas otras han resultado heridas en las protestas masivas desde que los militares tomaron el poder en un golpe de Estado el 25 de octubre.
El comisionado de relaciones exteriores de la UE, Josep Borrell, declaró que los reiterados llamados a las autoridades sudanesas a que se abstengan de aplicar violencia contra los manifestantes “han caído en oídos sordos”.
El golpe de Estado trastrocó la transición a la democracia en Sudán luego de tres décadas de represión y aislamiento internacional bajo el régimen autoritario de Omar al-Bashir.
La nación africana ha estado en un frágil sendero hacia la democracia desde que un alzamiento popular llevó a los militares a derrocar a al-Bashir y su gobierno islamista en abril del 2019.
Borrell afirmó que la represión, incluyendo la violencia contra civiles y la detención de periodistas y activistas, ha dejado a Sudán “en el peligroso sendero que lo aleja de la paz y la estabilidad”.
Llamó a las autoridades militares a reducir las tensiones pues “es esencial evitar más pérdidas de vidas”.
La represión, indicó Borrell, está entorpeciendo los esfuerzos de la ONU de hallar una solución pacífica a la crisis, que empeoró días atrás tras la renuncia del primer ministro Abdala Hamdok.
