El C-130 se sumó a otros aviones, barcos y un helicóptero desplegados por la marina tailandesa para contener los daños del crudo de la Star Petroleum Refining Public Company, vertido el martes por la noche desde un puesto de amarre en el Golfo de Tailandia.
Según la información de la Agencia de Desarrollo de Tecnología Espacial y Geoinformática, el viento podría empujar el viernes la mancha de crudo hacia las importantes playas de la provincia de Rayong, en la isla de Samet, si no se limpia antes, explicó el contraalmirante de la marina tailandesa Wichanu Thupa-ang.
La mancha cubría unos 11.65 kilómetros cuadrados, según estimaciones de la agencia, añadió.
Star Petroleum Refining calculaba que se habían vertido un total de entre 20 y 50 toneladas de petróleo. La cantidad de crudo en la mancha se había reducido a 5.3 toneladas después de que el miércoles se emplearan aerosoles dispersantes desde el aire, señaló la firma en un comunicado. Algunas estimaciones iniciales sobre la cantidad de crudo derramado eran mucho mayores.
La parte más grande de la mancha quedaría contenida en una zona señalizada con boyas y después aspirada y almacenada en tanques de contención para desechar el crudo de forma apropiada, dijo Wichanu.
El crudo que se dirigía hacia la playa también podía contenerse y redirigirse a mar abierto, añadió.
Si el petróleo llega a la costa, podría afectar a 24 hectáreas de coral y 48 hectáreas de pasto marino, lo que causaría un daño medioambiental que tardaría en recuperarse, indicó Pornsri Sutthanarak, subdirector general del Departamento de Recursos Marinos y Costeros.