MADRID, 1 (EUROPA PRESS)
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha prometido este martes solidaridad con el pueblo ucraniano en la firma junto al ministro de Presidencia, Félix Bolaños, de un acuerdo para localizar y digitalizar para su análisis 30.800 expedientes penitenciarios de presos encarcelados durante el franquismo por razones políticas, religiosas o de orientación sexual.
En declaraciones a los medios, Grande-Marlaska se ha remitido a la entrevista de ayer en TVE del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para reiterar el compromiso con el pueblo ucraniano víctima de la invasión rusa. Ni el titular del Interior ni el de Presidencia han detallado cómo será este mecanismo de solidaridad.
«Toda la solidaridad con el conjunto de los ucranianos, con los que están aquí y con los que puedan venir. Es un deber ético y hoy estamos aquí hablando de memoria democrática y de dignidad, y evidentemente, como ya hemos dicho, hemos sido, somos y seremos solidarios», ha señalado el ministro del Interior al ser preguntado al final del acto sobre los planes para acoger a los ucranianos.
CRUELDAD DEL RÉGIMEN DE PUTIN
Durante el acto, celebrado en el Centro de Inserción Social (CIS) Victoria Kent -y en el que ha participado también el secretario general de Instituciones Penitenciarias, Ángel Luis Ortiz–, el ministro Félix Bolaños ha apostado por proteger la memoria de las víctimas de la represión franquista por el «deber de no repetir el terror.
En su intervención sin preguntas, Bolaños ha subrayado la importancia de un acto de este tipo en el contexto de la guerra de Ucrania. En este sentido, ha criticado la «crueldad» del régimen de Vladimir Putin que «se ceba con los ucranianos» de una forma «injusta», ya que ataca los derechos humanos. Frente a esto, ha puesto en valor la «respuesta firme de Europa sin fisuras».
Bolaños y Grande-Marlaska han trazado paralelismos entre las víctimas del franquismo y las de la guerra iniciada por Putin, con un mensaje en el que han mostrado la necesidad de defender los valores democráticos frente a «la barbarie y la sinrazón».
Los expedientes estaban bajo custodia del Ministerio del Interior en el CIS Victoria Kent, perteneciendo a los reclusos de las antiguas cárceles de Carabanchel y de Alcalá de Henares. Son un conjunto de 30.800 expedientes cuyo análisis permitirá determinar qué porcentaje de los mismos corresponde a presos encarcelados por razones políticas, sociales, ideológicas, religiosas o de orientación sexual.