El 11 de marzo, David Monreal Ávila, gobernador de Zacatecas, se reunió con habitantes de las comunidades desplazadas en el municipio de Jerez, quienes dieron a conocer que el mandatario estatal aseguró que en 14 días habría condiciones para que las familias regresaran a sus hogares.
Lo anterior fue confirmado por el gobierno del estado a Grupo Fórmula, aunado al compromiso de instalar bases militares y elementos de seguridad federal cerca de las comunidades, para que estas puedan atender sus cultivos de durazno antes de poder regresar a sus hogares.
El mandatario estatal estuvo presente este lunes en Jerez, Zacatecas, donde se dio a conocer información respecto al despliegue de fuerzas federales de seguridad en el municipio, lo cual permitiría a sus habitantes ‘recuperar la tranquilidad’.
Las tropas que arribaron a Zacatecas son provenientes de Puebla y Veracruz. Se estima que tres jefes, 22 oficiales, 250 elementos y 48 patrullas que se establecerán en las comunidades de Palmas Altas y Villa Hermosa, en Jerez.
“Ir a recuperar patrimonio, territorio de nuestras gentes. (...) Una vez que vayamos avanzando, recuperando vamos a ir a un segundo momento para la cotidianidad, vamos a ayudar con toda una política pública que lleve a la recuperación del patrimonio a toda esta gente que ha sido lastimada”, dijo el gobernador en entrevista con medios de comunicación.
El jueves 10 de marzo se manifestaron en el palacio nacional los habitantes de una de las comunidades desplazadas por el crimen organizado en Jerez, Zacatecas, exigiendo a la autoridad federal intervenir en la situación que les apremia.
En Zacatecas se está librando actualmente una guerra entre cárteles, que se disputan el territorio que atraviesa al estado por ser la ruta más corta para el trasiego de drogas que arriban en el puerto de Veracruz y tienen dirección a Estados Unidos.
Dichas condiciones de inseguridad en la entidad han culminado en que los grupos delictivos que participan en la guerra han tomado los hogares de las comunidades ubicadas en Jerez, Zacatecas, como cuarteles operativos, desplazando a las familias que por décadas han vivido en la zona.
