La calidad de vida de los habitantes de Oaxaca, entidad gobernada por Alejandro Murat, es la más baja a nivel nacional.
De acuerdo a una encuesta de Arias Consultores, únicamente el 20.8% de los oaxaqueños consideraron que su calidad de vida es buena. Este porcentaje coloca a la entidad en el último lugar del ranking.
En tanto, 75.6% precisaron que viven de una manera regular y 3.7% la consideraron como mala.
Cabe destacar que Oaxaca se encuentra por debajo de la media nacional en este rubro (40.4% buena, 52.1% regular y 7.5% mala).
Un ejemplo del por qué la calidad de vida en Oaxaca es mala o regular, la viven comunidades triquis que sufrieron un desplazamiento forzoso a causa de la incursión de un grupo armado en Tierra Blanca, localidad de Santiago Juxtlahuaca.
Familias enteras tuvieron que salir de esta comunidad, por lo que la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) tomó cartas en el asunto y emitió una recomendación al gobernador de Oaxaca para que, en un plazo de tres meses, repare el daño y garantice a estas 137 familias un retorno seguro a casa.
El 16 de marzo se cumple el plazo impuesto por la CNDH para que las autoridades acepten o rechacen las recomendaciones; si se negaran a cumplirlas, el Senado los llamará a comparecencia.
Ante ello, las familias hicieron un llamado para que “por actos de humanidad” acepten las recomendaciones, además de buscar estrategias necesarias que ayuden a generar las condiciones de seguridad para el retorno de los desplazados.
Inseguridad también provoca mala calidad de vida
Además otro grave problema que hay en Oaxaca es la seguridad. Para muestra un botón: el sábado 12 de marzo fueron asesinadas cuatro mujeres en la zona del Bajo Mixe y en el Istmo de Tehuantepec.
El cuerpo de la primera víctima fue localizado en un paraje cercano al Centro de Estudios Científicos y Tecnológicos (Cecyteo) del municipio El Barrio La Soledad, ubicado en la región del Istmo de Tehuantepec. Los informes señalaron que el cuerpo presentaba diversas heridas de bala y junto a él había un presunto mensaje de la delincuencia organizada.
En tanto que las otras tres víctimas fueron asesinadas en la localidad de Cerro Mojarra, del municipio de San Juan Cotzocón Mixe, región Sierra Norte.
Dos de las mujeres murieron en el interior de un vehículo y una más fuera de él. Las tres eran familiares y según se ha informado, se trató de la abuela, madre e hija, a quienes una o varias personas dispararon en su contra.