Sri Manifestantes queman la residencia familiar del primer ministro de Sri Lanka a pesar de su dimisión

MADRID, 9 (EUROPA PRESS)

Las tensiones en Sri Lanka siguen en aumento a pesar de la dimisión del primer ministro, Mahinda Rajapaksa, este mismo lunes, y un grupo de manifestantes ha quemado la residencia que la familia posee en la ciudad de Medamulana, en el sur de la isla.

Así lo ha avanzado el diario ceilandés ‘Daily Mirror’, que además señala que las protestas se han dado también el la residencia oficial, conocida como ‘Temple Trees’, en la capital, Colombo. Allí, a pesar de la respuesta policial, los manifestantes han asaltar el edificio.

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Junto a estas viviendas, los manifestantes también han arremetido contra los domicilios oficiales del alcalde de Marotuwa, Saman Lal Fernando, localidad cercana a la capital, así como de al menos cinco parlamentarios.

Las protestas en Sri Lanka siguen su curso a medida que la violencia aumenta a pesar de la renuncia del primer ministro Rajapaksa tras varios meses de protestas por la que es ya considerada la peor crisis económica desde que la isla se independizó de Reino Unido británico.

Los enfrentamientos en las calles ceilandesas han dejado ya varios fallecidos, entre ellos el diputado del oficialista Partido Frente Popular (SLPP) Amarakeerthi Athukorala, quien ha muerto en un tiroteo en la ciudad de Nittambuwa, en el oeste del país, después de abrir fuego y herir gravemente a dos personas que participaban en los bloqueos de una carretera.

En este contexto, un total de 157 personas han sido ingresadas en el Hospital Nacional de Colombo, elevando la cifra adelantada este mismo lunes que situaba en 40 los heridos.


Por su parte, el presidente, Gotabaya Rajapaksa, hermano del ya dimitido primer ministro, ha señalado que «la violencia no resolverá los problemas actuales» y ha pedido a la población que mantenga la calma y ejerza su derecho a la protesta con «moderación», pidiendo al mismo tiempo colaboración para resolver esta crisis de manera conjunta.

Sin embargo, ante la complejidad y violencia de la situación, las autoridades de Sri Lanka han decretado en las últimas jornadas el estado de emergencia así como el toque de queda, que si bien iba a culminar a primera hora del martes (hora local), ha sido ampliado por 24 horas más.

En virtud de esta medida, ninguna persona puede estar en la vía ni terrenos públicos a no ser que cuente con la justificación pertinente de algún organismo oficial autorizado.

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