MADRID, 5 (EUROPA PRESS)
El ministro de Defensa australiano, Richard Marles, ha expresado a Pekín la preocupación del Gobierno australiano por el incidente, que tuvo lugar a finales del mes de mayo.
"La intercepción resultó en una maniobra y una conducta peligrosas que amenazaron la seguridad tanto de la aeronave como de la tripulación australiana", ha advertido Marles en declaraciones recogidas por 'The Sydney Morning Herald'.
El avión P-8 de Australia estaba llevando a cabo una actividad rutinaria de vigilancia marítima el 26 de mayo cuando fue interceptado por un avión de combate J-16. El peligro vino porque el caza J-16 habría volado "muy cerca del costado" del avión P-8, según ha detallado el ministro de Defensa australiano.
"El J-16 luego aceleró y atravesó el morro del P-8, colocándose frente al P-8 a una distancia muy corta (...) Obviamente, esto es muy peligroso", ha añadido.
El Ministerio de Defensa ha explicado que, "al igual que otros países", ha llevado a cabo durante décadas la vigilancia marítima en el mar de China Meridional, de acuerdo con el Derecho Internacional, por lo que ha advertido a China de que tal incidente "no disuadirá a Australia", según ha recogido el diario 'Herald Sun'.
"Quiero dejar también muy claro que este incidente no disuadirá a Australia de continuar participando en estas actividades, que están dentro de nuestros derechos y del Derecho Internacional, para garantizar que haya libertad de navegación en el mar de China Meridional porque eso es fundamentalmente en interés de nuestra nación", ha expresado.