Los republicanos intensificaron el jueves sus críticas públicas hacia el expresidente, Donald Trump, y algunos dijeron que era momento de que el partido diera vuelta a la página después de obtener resultados decepcionantes en las elecciones intermedias, incluso mientras Trump se prepara para anunciar una tercera candidatura a la presidencia de Estados Unidos la próxima semana.
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La vicegobernadora republicana de Virginia, Winsome Earle-Sears, quien alguna vez fue una abierta partidaria de Trump, dijo que los votantes habían enviado “un mensaje muy claro” el martes de que “ya fue suficiente”.
Earle-Sears, quien fungió como vicepresidenta de un grupo llamado Black Americans to Re-elect President Trump (Estadounidenses Negros en pro de la Reelección de Trump) en 2020, también dijo que no podía respaldar otra campaña de Trump.
Algunos asesores habían pedido a Trump que aplazara el anuncio de su candidatura hasta después de la segunda vuelta de las elecciones por el escaño en el senado por el estado de Georgia, prevista para el seis de diciembre.
La elección podría determinar qué partido controla la cámara alta del país (con esto buscaban evitar convertir la contienda en un referendo sobre él y ayudar involuntariamente a los demócratas). Sin embargo, Trump rechazó la recomendación e invitó a reporteros a un “anuncio especial” el 15 de noviembre a las nueve de la noche en su club Mar-a-Lago.
Eso deja a Trump tratando de lanzar una candidatura en un momento en el que se encuentra en una posición de mucha vulnerabilidad luego de haber dominado el partido, en gran medida sin oposición, desde que ganó la nominación en el 2016.
Aun así, Trump ha demostrado una notable resistencia, conservando el apoyo de su base, incluso durante el escándalo de “Access Hollywood”, que estuvo a punto de hundir su primera campaña, y tras el mortal asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021.
Al mismo tiempo, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, que ganó fácilmente su reelección este martes, está consiguiendo nueva atención a medida que los republicanos sopesan públicamente dejar atrás a Trump.
El senador, John Thune de Dakota del Sur, el segundo republicano en rango en el senado, señaló el papel de Trump en elevar a algunos candidatos sin experiencia y controversiales durante las primarias de este año, que luego perdieron en las elecciones generales de esta semana.
Thune dijo que esperaba que el partido empezara a notar el surgimiento de líderes más jóvenes, pues puntualizó que no se puede tener un partido que está construido alrededor de la personalidad de una persona.
El expresidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, quien tuvo diferencias con Trump durante sus primeros dos años en el cargo, calificó a Trump como “un lastre” que dañaría las posibilidades del partido en el 2024.
El senador republicano por Pensilvania, Pat Toomey, próximo a jubilarse, también dijo que la intervención de Trump era la culpable de las derrotas sufridas por el Partido Republicano en su estado, y señaló que los candidatos respaldados por Trump tuvieron un desempeño mucho peor que otros republicanos en la papeleta.
Trump y los resultados nocturnos
Aún existe la posibilidad de que otros candidatos apoyados por Trump ganen sus contiendas. Aunque la aplastante victoria republicana que se había pronosticado no se cristalizó, el partido sigue bien posicionado para tomar el control de la Cámara de Representantes, y podría llevarse el del senado también. En muchas contiendas es demasiado pronto para declarar un ganador.
“No existe tal cosa como una victoria fea o una linda derrota”, comentó Jason Miller, exfuncionario de campaña de Trump que estuvo entre aquellos que le aconsejaron postergar su anuncio hasta después de la segunda vuelta de las elecciones de Georgia.
Asimismo, Miller predijo, “La carrera política de Nancy Pelosi está acabada y la agenda de Biden está muerta”. Pese a que los resultados no salieron como esperaban, otros aliados de Trump ofrecieron declaraciones a los medios de comunicación en nombre del expresidente, dándole su apoyo antes de cualquier anuncio.
El representante aliado en el Congreso, afirmó que si Trump se postula para el 2024, no sólo contará con su apoyo, sino que tendrá el respaldo de millones de estadounidenses en el país.
Por otra parte, el candidato al senado por Ohio, JD Vance, que demostró ser el más exitoso de los candidatos apoyados de Trump, dijo que si el expresidente decide volver a postularse, confía en que será el candidato del partido.
La decisión de Trump de seguir adelante con su campaña está impulsada, en parte, por su deseo de tratar de congelar al conjunto de aspirantes y detener el ascenso de DeSantis, a quien ha considerado durante mucho tiempo su principal rival.
En una señal de frustración, Trump emitió un largo comunicado el jueves por la noche en el que arremetió contra Fox News y otros medios de comunicación del imperio de Rupert Murdoch por “ir con todo por el gobernador Ron DeSanctimonious (Ron DeSanturrón) DeSantis”. A quien describió como un “gobernador republicano promedio con grandes relaciones públicas”, al tiempo que volvió a atribuirse la victoria de DeSantis del 2018.
Aunque los aliados de Trump habían insistido en que los reportes de tensiones entre los hombres eran exagerados, Trump, quien ha criticado en privado a DeSantis por no descartarse como candidato contra él, lo hizo ahora públicamente.
“Bueno, en términos de lealtad y clase, esa no es realmente la respuesta correcta. Estamos exactamente en la misma posición ahora”, escribió, comparando la contienda con su campaña ganadora del 2016.
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