MADRID, 6 (EUROPA PRESS)
"Lo que sucedió en el Palacio del Planalto, en la Alvorada y en el Tribunal Supremo fue una revuelta de los ricos que perdieron las elecciones. No podemos tomarlo a broma porque un día el pueblo se puede cansar de ser pobre y hará que las cosas cambien en este país", ha dicho durante la toma de posesión de Aloizio Mercadante como nuevo presidente del banco federal de desarrollo, el BNDES.
"Gane las elecciones precisamente para los cambios que no han sido hechos. Este país no puede continuar gobernando para una pequeña minoría", ha dicho Lula durante el acto celebrado en la sede del BNDES, en Río de Janeiro.
Lula ha aprovechado su intervención para lamentar la "gravísima" campaña de desprestigio al que fue sometido el BNDES durante el pasado periodo electoral, en relación a la existencia de una "caja negra" que contendría información del dinero que el banco entregó a fondo perdido a países amigos de los gobiernos del PT.
"Las narrativas, aunque sean mentiras, valen más que las verdades muchas veces contadas. En los últimos cuatro años, hemos vivido un proceso de locas mentiras", ha dicho Lula, quien ha subrayado que los fondos no se entregaron a gobiernos sino a empresas brasileñas para la construcción de infraestructuras y servicios.
En relación a las deudas contraídas por otros Estados con el BNDES, Lula se mostrado convencido de que pagarán "porque todos son países amigos de Brasil" y ha recordado que si dejaron de cobrar préstamos de países como Cuba o Venezuela fue consecuencia de la ruptura de relaciones diplomáticas impuesta por Jair Bolsonaro.
Por último, entre críticas al Banco Central, Lula ha señalado que "el BNDES debe priorizar la financiación de los micro y pequeñas empresas para que Brasil pueda "dar un salto de calidad" en la producción y el crecimiento económico del país.