MADRID, 13 (EUROPA PRESS)
"El plan incluía sabotajes y personas entrenadas militarmente disfrazadas de civiles para llevar a cabo acciones violentas, ataques a edificios gubernamentales y tomar rehenes", ha dicho Sandu en una rueda de prensa, en la que ha destacado que no es la primera vez que Rusia pretende acometer este tipo de acciones en Moldavia.
"Los informes recibidos de nuestros socios ucranianos indican las ubicaciones y los aspectos logísticos de la organización de esta actividad subversiva. El plan también prevé el uso de extranjeros para acciones violentas", ha contado, según recoge el portal moldavo de noticias NewsMaker.
En ese sentido, Sandu ha contado que para llevar a cabo su plan, Rusia se puso en contacto con algunas fuerzas internas, como el rusófilo Movimiento Socio-Político Republicano Igualdad (SOR), veteranos y antiguos agentes y personas conocidas por sus vínculos con Moscú como el exdiputado Vladimir Plahotniuc.
El objetivo, ha explicado, sería "anular el orden constitucional" y cambiar el poder legítimo por otro que pondría al país "a disposición de Rusia" no solo "para detener el proceso de integración europea", sino "también para que Moldavia pueda ser utilizado por Rusia en su guerra contra Ucrania".
Por ello, Sandu ha pedido al Parlamento que acelere lo máximo posible los plazos para aprobar una serie de proyectos de ley que dotarán a la Fiscalía y al resto de autoridades con las herramientas necesarias "para combatir con mayor eficacia los riesgos a la seguridad del país".
A su vez, ha recalcado que "todos los que participan en tales acciones y quienes los protegen deben rendir cuentas" y ha advertido al Kremlin que sus intentos por "llevar la violencia" "no tendrán éxito".
Estas declaraciones vendrían a confirmar las advertencias del presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, quien la semana pasada durante su paso por Bruselas reveló a Sandu de que habían interceptado un plan de Rusia para "destruir el orden democrático en Moldavia".