MADRID, 16 (EUROPA PRESS)
Documentos judiciales señalan que las víctimas habían tratado de comprar armas a los soldados, pero fueron asesinados por problemas entre las partes para llegar a un acuerdo. Sus cuerpos fueron hallados posteriormente mutilados y dentro de varios sacos que fueron lanzados a un río cerca de la ciudad de Timika, en la provincia de Papúa.
Las autoridades han confirmado ahora que cuatro de los acusados han sido hallados culpables de asesinato premeditado, por lo que dos de ellos han sido condenados a cadena perpetua y otros dos a 15 y 20 años de cárcel, según informaciones de la agencia BNN.
Un quinto militar fue condenado a cadena perpetua el mes pasado por su implicación en este mismo caso, mientras que un sexto soldado falleció a la espera de que se celebrara el juicio. Todos ellos fueron expulsados del Ejército.
Indonesia mantiene una fuerte presencia militar en Papúa, donde existen grupos de milicianos separatistas que luchan por la independencia de la zona desde hace décadas. El Ejército ha hecho frente en varias ocasiones a acusaciones de abusos de los Derechos Humanos en la citada región, los cuales ha negado reiteradamente.