Portland, Oregon recibió casi 30 centímetros (un pie) de nieve en lo que ha resultado ser la segunda nevada más intensa de la historia. Las zonas montañosas de California experimentaron acumulaciones de nieve casi sin precedentes. Y los suburbios de Phoenix, Arizona, se encontraron al despertar con una capa de nieve sobre los cactus y los lozanos campos de golf.
¿A qué se debe tanta nieve?
“Esta lluvia y nieve son contrarias a lo normal y sumamente inesperadas”, dijo el meteorólogo Ryan Maue, ex jefe científico de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA por sus siglas en inglés). “Es algo único en una generación”.
Los meteorólogos dicen que esta intensa temporada invernal no admite explicaciones sencillas.
El fenómeno actual de La Niña afecta el clima global, pero según Maue no es el único factor.
Bianca Feldkircher, del Servicio Meteorológico Nacional, dijo que una pauta persistente de bloqueo sobre el Pacífico y el aire frío que baja del Ártico hacia el sur han creado las condiciones para la amplia nevada de la costa occidental.
“No solo hubo nevadas significativas en zonas que conocen la nieve, sino también en las elevaciones menores del sur de California, lo cual es súper raro”, dijo Feldkircher.
Por ejemplo, el pronóstico del 1 de marzo advertía nevadas en partes de Phoenix, lo que Feldkircher considera “súper inusual” para esta época del año. Y la semana pasada, en Portland se registraron nevadas anormalmente intensas de 28 centímetros (11 pulgadas), la segunda jornada con más nieve de la historia de la ciudad.
Con respecto al cambio climático provocado por el ser humano, los meteorólogos dicen que es difícil determinar su papel en esta insólita temporada invernal de la costa del Pacífico.
Pero los fenómenos climáticos extremos son cada vez más frecuentes ha medida que se elevan las temperaturas globales. “El calor produce humedad, la humedad provoca tormentas y el calor y la humedad se combinan para provocar tormentas más intensas”, dijo Feldkircher.