Este domingo, el bloguero militar ruso Vladlen Tatarsky fue asesinado en un presunto acto terrorista en un café de la ciudad de San Petersburgo, Rusia, después de que le entregaran un explosivo al interior de una estatuilla de “reconocimiento”.
En el lugar, al menos 16 personas resultaron lesionadas y el momento exacto de la explosión quedó registrado a través de videos de las personas que transitaban por el lugar.
Diversos reportes desde Rusia calificaron la muerte del popular corresponsal de guerra como un atentado, en el que suele ser el lugar de encuentro de diferentes nacionalistas rusos, por lo que algunos se han atrevido a señalar a Ucrania.
Vladlen Tatarsky defendía la operación militar ordenada por Vladimir Putin en Ucrania e incluso solicitaba que los ataques al país vecino se agudizaran en contra de la infraestructura ucraniana.
También, era conocido en redes sociales, sobre todo Telegram, por el tono de sus mensajes en video, en los que no dudaba en despreciar y descalificar a los ucranianos, sobre todo después de la invasión que iniciaron las Fuerzas Armadas rusas hace ya más de un año.