Una grieta marina puede ser el indicador de un posible temblor de gran magnitud al que los seres vivos estamos expuestos, por lo menos eso mencionaron investigadores de la Universidad de Washington.
El nombre de la grieta es Pythia’s Oasis y fue descubierta hace algunos años en el segmento de Oregon Central, en la subducción de Cascadia, en el Océano Pacífico.
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Los investigadores de la capital de EU compartieron el hallazgo que se hizo en 2015 y llegaron a la conclusión de que “los fluidos proceden de la compactación del agua de los poros y de reacciones de deshidratación mineral con temperaturas de origen mínimas de entre 150° y 250°C, lo que sitúa el origen en el límite de la placa o cerca de él, frente a la costa de Oregon Central, la cual se extiende desde el norte de California hasta Canadá”.
Las características de la grieta no tienen precedentes en los registros del país y por ello, el agua que fluye por el orificio, mencionan, “puede fungir como un lubricante tectónico, que si falla podría afectar la placa en la que se encuentra y provocar un desastre”, donde podría verse afectado México.
Esta acción podría provocar un accidente geológico capaz de desencadenar un terremoto de gran magnitud en el noroeste del Pacífico, y el agujero podría ser el combustible que necesita la falla de Cascadia, relataron desde Washington.
No se pueden predecir los desastres naturales
Desde la educación básica nos enseñaron a actuar de forma prudente ante desastres naturales como un temblor y de la misma forma, nos recuerdan constantemente que ningún desastre natural se puede predecir con certeza.
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Esto significa que en cualquier momento puede temblar, de hecho, todo el tiempo hay temblores en la Tierra debido a su movimiento pero, no hay forma hoy en día de predecirlo como se hace con las lluvias, donde existen estadísticas ya comprobadas.
