VARSOVIA, Polonia (AP) — El partido que gobierna Polonia quiere preguntar a los votantes en un referendo si están a favor de aceptar “miles de inmigrantes ilegales de Oriente Medio y África” dentro de un plan de reubicación de la Unión Europea, según dijo el primer ministro el domingo, dentro de los esfuerzos de su gobierno conservador por hacer frente a un desafío de la oposición.
El primer ministro, Mateusz Morawiecki, anunció la pregunta del referendo en un video publicado en redes sociales. El mensaje apuntaba a que su partido, Ley y Justicia, quiere incluir la inmigración en su campaña para las elecciones generales, una estrategia que le ayudó a llegar al poder en 2015.
El gobierno ha dicho antes que quiere celebrar el referendo a la vez que las elecciones parlamentarias de otoño, previstas para el 15 de octubre. Los líderes han anunciado otras dos preguntas en los últimos días.
Morawiecki indicó que la pregunta sería: “¿Apoya usted la admisión de miles de inmigrantes ilegales de Oriente Medio y África dentro del mecanismo de reubicación forzosa impuesto por la burocracia europea?”.
Los ministros del Interior de la Unión Europea aprobaron en junio un plan para compartir la responsabilidad de gestionar a las personas que llegan a Europa sin autorización, el origen de una las crisis políticas más antiguas del bloque. Los ministros apoyaron un acuerdo que equilibraba la obligación de que los países a los que llegan más migrantes procesen y alojen a los recién llegados con el requisito de que otros miembros presten apoyo, ya sea de forma económica o alojando refugiados.
Ley y Justicia tiene una larga disputa con la Unión Europea de 27 miembros por la percepción del bloque de que los cambios introducidos por Varsovia en la judicatura y las normas de medios suponen una erosión democrática.
El sistema de asilo europeo colapsó hace ocho años después de que más de un millón de personas llegaran al bloque, la mayoría huyendo de la guerra en Siria, y sobrepasaran la capacidad de recepción en Grecia e Italia. Eso provocó una de las mayores crisis políticas de la UE.
Las naciones de la UE discuten desde entonces sobre qué países deben hacerse cargo de las personas que llegan sin autorización, y si otros miembros deben estar obligados a ayudarles a gestionarlo.