MADRID, 8 (EUROPA PRESS)
"Ya son cuatro inviernos sin suministro eléctrico, sin calefacción, sin agua caliente. No sabemos cómo lo afrontamos, lo afrontamos de la manera que se pueda. Intentamos encontrar las maneras de vivir en estas condiciones y es lamentable también que últimamente estamos normalizando que estemos sin luz", ha explicado la presidenta de la Asociación Cultural de Mujeres Tabadol del sector VI de la Cañada Real Galiana, Houda Akrikez, en declaraciones a Europa Press.
Según precisa Akrikez, "no es normal que las vecinas y los vecinos después de tres años de lucha" sigan "sin ninguna solución, sin ninguna contestación". Asimismo, denuncia que se están produciendo "derribos sin ninguna autorización y a dedo".
Ante esta situación, piden a la Comunidad de Madrid y al Gobierno que cumplan con el pacto regional por la Cañada Real Galiana, firmado el 17 de mayo de 2017, que contempla la rehabilitación del suministro de luz.
"La Comunidad y el Gobierno tienen que apostar por una vida digna para los vecinos y las vecinas, para la población madrileña, somos ciudadanos de esta región y nos merecemos ser reconocidos", defiende Akrikez.
Además, sobre los realojos, advierte de que es un tema "bastante complicado" porque, normalmente, son "procesos bastante largos y lentos". "¿Cuánto tiempo van a tardar estos realojos y cuánto tiempo van a esperar las familias de la Cañada Real sin luz y a oscuras hasta que se cumpla el realojo?", plantea.
La solución, a su juicio, pasa por que se den contratos a las familias, por devolverles el suministro de luz y por que haya una mesa de seguimiento. Según precisa, la mayoría de las vecinas no están de acuerdo con que la solución pase por los realojos, aunque reconoce que hay familias que sí lo necesitan y que "es urgente que sean realojadas".
En todo caso, ha insistido en que los realojos se están haciendo "de manera forzada" porque las familias se ven "obligadas" a aceptarlo ya que viven en "viviendas indignas". "No se puede estar en una casa donde no hay agua caliente y no hay calefacción", añade.
Akrikez explica que son sus casas y que tienen "un arraigo bastante importante" con Cañada Real Galiana, su "barrio". "Nuestras casas son nuestras, nosotras reconocemos que el terreno no es nuestro. No es nuestro porque no tenemos escrituras, pero sí que han sido comprados, o sea, los terrenos han sido comprados, han sido pagados. Además, hemos estado pagando el IBI hasta hace nada", señala.
A su juicio, la razón por la que quieren realojarlas en otros puntos de la comunidad es que "tienen muchísima prisa para que vayan saliendo de las viviendas" pues es "un terreno jugoso" para "las grandes urbanizaciones del sureste de Madrid".
En este contexto, pide que se tenga en cuenta a los vecinos a la hora de tomar decisiones sobre su futuro y el de sus hijos e hijas. "Cañada Real es un barrio de Madrid y yo creo que además tiene una historia bastante importante, tiene muchos años de vida y yo creo que no podemos dejar de lado que es un barrio que ha crecido gracias a la fuerza vecinal y que sigue en lucha gracias la fuerza vecinal", remarca.
Con motivo de este tercer aniversario sin luz, los vecinos de Cañada Real han realizado varias acciones de concienciación y han hecho un llamamiento a los responsables políticos y a la sociedad civil: "No os podéis quedar callados ante esta violación de derechos".
Entre las últimas acciones, destacan la inauguración, el pasado 1 de octubre, de un parque infantil reivindicativo que se llama 'Con la luz no se juega' y una campaña difundida por redes sociales titulada 'Esto no es normal'.
"Nuestro mensaje siempre es claro: Queremos luz, queremos contratos y queremos una mesa de seguimiento y vamos a seguir luchando por lo que es nuestro, que son nuestras casas, que es nuestro barrio", subraya Akrikez.
LA LUCHA DE LOS VECINOS
En estos años, los vecinos de la Cañada Real no han parado de denunciar su situación ante la Comunidad de Madrid, el Ayuntamiento de Madrid y de Rivas y ante el Gobierno de España, a través del Alto Comisionado contra la Pobreza Infantil; y se han manifestado al grito de 'Luz para la Cañada' ante las distintas administraciones y empresas implicadas como la Asamblea de Madrid o la sede de Naturgy, compañía que suministra el servicio en la zona.
En esta línea, constituyeron la Plataforma Cívica de Apoyo a la Luz en Cañada Real, integrada por más de 50 organizaciones de la sociedad civil junto con las asociaciones vecinales de Cañada Real, desde la que han exigido a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, una solución "urgente".
En 2021, España recibió varias llamadas de atención por parte de la ONU por la situación en la Cañada Real Galiana. También el Defensor del Pueblo ha manifestado su preocupación y ha exigido respuestas.
Desde el Comité Ejecutivo del Pacto por la Cañada Real Galiana -órgano que conforman la Delegación del Gobierno, los tres ayuntamientos por los que discurre este camino donde se ubica el asentamiento (Madrid, Coslada y Rivas Vaciamadrid) y el Ejecutivo autonómico- se fijó a mediados de noviembre de 2021 una hoja de ruta con 21 actuaciones que incluye el realojo de 160 familias del Sector VI, una medida en la que se invertirán 34 millones de euros financiados al 50% por las dos administraciones.
Además, el Gobierno aprobó, a propuesta del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, un Real Decreto por el que se regulaba la concesión directa de subvenciones por valor de 5 millones de euros para los Ayuntamientos de Madrid y de Rivas Vaciamadrid, para destinar al plan de realojo de las familias en situación de vulnerabilidad extrema de la Cañada Real Galiana.
ADVERTENCIA DEL CONSEJO DE EUROPA
Hace un año, en octubre de 2022, el Comité Europeo de Derechos Sociales del Consejo de Europa --comité de expertos independientes establecido en virtud del artículo 25 de la Carta Social Europea-- declaró admisible por unanimidad una reclamación colectiva contra España e instó a las autoridades españolas a adoptar "medidas inmediatas" en la Cañada Real Galiana.
En particular, el organismo instó al Ejecutivo a "garantizar que todas las personas afectadas tengan acceso a la electricidad y la calefacción, teniendo en cuenta, en particular, las necesidades de los grupos vulnerables afectados (incluyendo niños, personas con discapacidades, personas con condiciones médicas, personas de origen extranjero, personas mayores y de etnia gitana)". Por otro lado, pidió que España ofrezca "un alojamiento alternativo adecuado a las personas afectadas cuando no es posible garantizar con seguridad el acceso a la electricidad y la calefacción".
El pasado mes de marzo de 2023, la Comunidad de Madrid señaló que técnicamente es "imposible" llevar la electricidad a los sectores V y VI de la Cañada Real Galiana.
No obstante, el pasado mes de agosto, tres anuncios diferentes de la Dirección General de Transición Energética y Economía Circular de la Consejería de Medioambiente, Agricultura e Interior, publicados en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid (BOCM), anunciaban hasta 13 líneas de alta tensión en los sectores 5 y 6 de la Cañada Real Galiana.
Por su parte, el pasado mes de septiembre la acusación particular en la causa en la que se investigan los cortes de luz en la Cañada Real ha reiterado al juez que emplace a la Comunidad de Madrid a aclarar quién ordenó la instalación de reconectores en los sectores 5 y 6 para limitar el suministro cuando se iniciaron los cortes.