Hace más de cinco años Mariela Vanessa Díaz Valverde fue vista por última vez, la joven estudiaba en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), pese a la insistencia de su familia para que la institución no escatimará recursos para colaborar con las autoridades capitalinas, esto no ocurrió.
Por este motivo, el rector de la UNAM, Enrique Graue, ofreció una disculpa pública a la familia de la joven por las omisiones que se cometieron tras la desaparición de Mariela, de quien aún no se sabe su paradero.
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“Si bien corresponde a las fiscalías la investigación de los delitos, me disculpo en nombre de la UNAM, ante ustedes y ante toda la comunidad universitaria, por lo que pudimos hacer y que no hicimos o hicimos insuficientemente”, expuso ante Gabriela Díaz, hermana de Mariela.
En su discurso también dijo que la disculpa es un acto de respeto a la memoria de la madre de Mariela, Herminia Valverde, así como de la familia Díaz Valverde, quienes no han dejado de buscarla.
Reconoció que la falta de entrega de información a la familia de manera oportuna contribuyó a las dificultades que enfrentó la familia ante las autoridades, por lo que pidió a la Fiscalía General de Justicia (FGJ) de la Ciudad de México agilizar la investigación y tenga coordinación con otras fiscalías y comisiones de búsqueda de personas.
“Para que se esclarezca la verdad, se haga justicia y se cumpla con la recomendación emitida por la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México a la instancia de procuración de justicia; y para que las entidades de atención de víctimas cumplan con lo dispuesto en la ley de la materia. Mariela Vanessa Díaz Valverde le sigue haciendo falta a su familia, a sus amistades, a sus compañeras y compañeros y, por supuesto, a su Universidad”, añadió Graue.
Familia pide que autoridad tenga humanismo
Gabriela Díaz Valverde, hermana de Mariela, exigió que las autoridades hagan lo que les corresponde, sobre todo que su actuación sea desde la humanidad, porque así no habría necesidad de exigir justicia, de demandar empatía y evitar la revictimización en las instituciones.
“Lo que un día no fue para Mariela -las condiciones mínimas para su búsqueda urgente- que sí pueda ser para los demás jóvenes de esta comunidad. Lo mínimo que merecemos las familias y las víctimas es el máximo apoyo, el respaldo de las instituciones, porque así lo establece la ley y esta casa de estudios tiene la facultad de brindar respaldo para protección de su comunidad”.
Díaz Valverde consideró que el daño se repara “si estamos dispuestos a recorrer el camino juntos y reconocernos como seres humanos en el proceso”.
Roxana Romero Román, integrante del colectivo “Nos hacen falta”, calificó como un logro para la familia de Mariela que la UNAM haya ofrecido una disculpa pública, pues es un paso más en su constante caminos para localizarla.
“La esperanza de la familia Valverde ha sido una llama que incendia los corazones de quienes los acompañan en la búsqueda de la verdad, la memoria, la justicia y la garantía de no repetición”.
