El Gobierno de Puebla podría tomar el control de la seguridad en el municipio de Tecamachalco tras la detención del titular de la dependencia, Alejandro Santizo Méndez, su escolta y 12 policías más por el asesinato de tres agentes estatales el pasado 19 de noviembre.
La Fiscalía General del Estado (FGE) de Puebla, ya investiga a los elementos de seguridad involucrados, incluido el titular de la Secretaría de Seguridad de esa región, Alejandro N. y su escolta, por el delito de homicidio calificado contra tres agentes de la Fiscalía de Investigación de Secuestros y Delitos de Alto Impacto (Fisdai).
Este domingo se llevó a cabo el homenaje de cuerpo presente a los elementos de la Agencia Estatal de Investigación asesinados la noche del viernes en el municipio de Tecamachalco, Puebla.
Durante la ceremonia, el titular de la FGE, Gilberto Higuera Bernal se comprometió a esclarecer los hechos con legalidad y eficiencia, a fin de aplicar la ley en contra de los responsables.
Este sábado confirmó que los hechos se dieron mientras los agentes atendían un evento delictuoso y elementos de la Policía Municipal de Tecamachalco acudieron al lugar y les dispararon “con posición de tiro específico” en sus cabezas.
Higuera Bernal precisó que el titular de Seguridad de Tecamachalco, Alejandro Santizo Méndez y el policía que lo acompañaba como su escolta, Hipólito González, participaron directamente en los hechos, aunque prefirió no dar más detalles por motivos de la investigación.
“Es un homicidio calificado en contra de tres policías y vamos a proceder legalmente, por supuesto en esta investigación estaremos indagando el uso de las armas, las cuales ya están aseguradas”.
Agregó que se realizarán los estudios periciales respectivos para determinar si las armas decomisadas han sido usadas en otros hechos ilícitos.
En tanto, el presidente municipal de Tecamachalco, Ignacio Mier Bañuelos explicó que el secretario y el policía que lo acompañaba se entregaron de manera voluntaria a las autoridades para ser juzgados y aseguró que lo ocurrido se trató de una “confusión por falta de comunicación”.
Asimismo, solicitó al gobierno de Miguel Barbosa Huerta asumir el control de la seguridad de dicho municipio, a fin de evitar una “crisis de inseguridad” en dicha demarcación que está considerada dentro del Triangulo Rojo por el robo de combustible, entre otros delitos de alto impacto.