Alejandro N., “El Tiburón”, un expolicía que fue secuestrado el 24 de febrero, sería una de las siete personas ejecutadas, cuyos cuerpos fueron abandonadas dentro de un vehículo sobre el Periférico Ecológico.
El 5 de abril, la Fiscalía General del Estado confirmó el macabro hallazgo que conmocionó a la zona metropolitana de la ciudad de Puebla. Siete cuerpos, cinco de ellos decapitados y uno con desmembramiento, fueron abandonados en un vehículo sobre dicha vialidad a la altura del Infonavit La Guadalupana.
Según versiones extraoficiales, los familiares de “El Tiburón” habrían acudido al Servicio Médico Forense (Semefo) para realizar la identificación.
El fiscal Gilberto Higuera Bernal indicó que existían mensajes sobre papel en cada cuerpo, refiriendo la razón de los asesinatos, los cuales están relacionados con actividades ilícitas como narcomenudeo, extorsión y robo a transportista.
José Alejandro Vega Flores, era un expolicía estatal que desapareció el 24 de febrero de este año, casi un mes después, apareció en un video en donde se muestra rodeado de hombres encapuchados y armados que se identificaron como presuntos miembros de la “Operativa Barredora”, célula del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
En la grabación también hacen referencia al asesinato de Adán Rosales, otro expolicía que fue encontrado sin vida en las inmediaciones del centro comercial Periplaza, de la capital poblana, acusado de participar presuntamente el robo a transporte y paso de migrantes.
Otra de las víctimas posiblemente incluida entre los cuerpos desmembrados sería “El Kevin”, un prestamista colombiano levantado a finales de marzo en la junta auxiliar de Zaragoza, pero hasta el momento las autoridades siguen con las investigaciones.