Algunas cosas trascienden generaciones y McDonald’s ha sido una de ellas. Desde niños hasta adultos, para muchos de nosotros, este restaurante ha sido un punto de encuentro donde se han creado innumerables recuerdos. Reuniones familiares, almuerzos después del colegio, celebraciones espontáneas y la emoción de recibir una Cajita Feliz han sido parte de la historia de muchas familias mexicanas.
Este lazo con la comunidad ha sido clave para que McDonald’s alcance cuatro décadas en México. Su permanencia va más allá del sabor y calidad de sus productos, pues ha logrado una conexión genuina con sus clientes. Para Arcos Dorados esta apertura, refuerza su compromiso con el país con una nueva sucursal en Satélite, que subraya el inicio de una era innovadora.
Tecnología, sustentabilidad y el futuro del servicio
McDonald’s Satélite representa una evolución en la experiencia del consumidor. Con un formato de compra digital avanzada, quioscos interactivos, AutoMac mejorado y la opción de gestionar pedidos desde la app, el proceso es más ágil y personalizado. La tradicional espera en fila queda atrás, dando paso a una interacción más eficiente y conveniente.
Modernizarse implica asumir responsabilidad para poder avanzar, y es por eso que la nueva sucursal integra soluciones ecológicas que reducen su impacto ambiental: iluminación LED de bajo consumo, sensores de movimiento para optimizar la energía, sanitarios con fluxómetros de bajo consumo y un sistema de aprovechamiento de agua condensada. Estas iniciativas refuerzan el compromiso de McDonald’s con la sostenibilidad sin comprometer la comodidad de sus clientes.
Un punto de encuentro que genera oportunidades
La historia de McDonald’s en México se ha construido a través de sus sabores icónicos, pero, a su vez, con oportunidades que han transformado vidas. La nueva sucursal en Satélite representa la creación de 80 empleos formales, que se suman a los más de 3,500 en la Zona Metropolitana del Valle de México. Con más del 80% de sus empleados menores de 24 años, Arcos Dorados se consolida como uno de los principales generadores de primer empleo en el país.
Para muchos jóvenes, trabajar en McDonald’s es el primer paso en su desarrollo profesional. Aprender disciplina, servicio al cliente y trabajo en equipo son habilidades clave que han impulsado a ex empleados a convertirse en emprendedores, gerentes y profesionistas exitosos.
Proveeduría local: cuando lo global impulsa lo nacional
Aunque McDonald’s es una marca global, su impacto en México es profundo. El 70% de sus proveedores son nacionales, garantizando frescura y calidad en cada ingrediente. La carne proviene de Michoacán y Sinaloa, el queso cheddar se produce en Silao, Guanajuato, los pepinillos en Guanajuato y la lechuga y cebolla en San Miguel de Allende. Cada bocado representa el esfuerzo de agricultores, ganaderos y productores mexicanos que encuentran en McDonald’s un aliado para el crecimiento del sector.
Nueva apertura: haciendo historia
Para Arcos Dorados, el restaurante de McDonald’s Satélite llega en un momento donde los consumidores buscan experiencias que vayan más allá de un simple producto. Un espacio donde la comunidad, la eficiencia y la tecnología convergen para ofrecer algo más que una comida rápida.
Esta sucursal es la insignia de un compromiso con la comunidad y su entorno. Sin dejar de ser un clásico.