Donovan Cariillo cumplió el sueño que se planteó desde hace algunos años, cuando el momento debutar en los Juegos Olímpicos de Invierno se consumó.

El patinador mexicano demostró su gran capacidad en la pista, por lo que logró el pase a la Final de la especialidad, en la que espera consumar su trabajo con una medalla.

Llegar a esta instancia ya es una victoria para Donovan, luego de que ha trabajado por años para estar ahí.

Lejos quedó el momento, en el que Carrillo tenía que entrenar en pistas de centros comerciales, con la mente puesta en trascender.

Hoy, el azteca es un patinador de élite, que se codea con los grandes de este deporte, pese a las carencias que tuvo en algún tramo de su vida.

En redes sociales, Donovan ha sido un fenómeno, que se ha convertido en motivo de inspiración, dada la capacidad demostrada en cada una de sus competencias.

El repudio también ha sido parte de su día a día, pues muchas personas lo han agredido verbalmente, con acusaciones homofóbicas, que empañan la trayectoria del mexicano.

Incluso, Carrillo ha dicho que de ser gay no tendría problema en revelarlo, pero respeta las preferencias sexuales de cada individuo, por lo que pide respeto.

“No me molesta que me llamen gay porque no lo soy, lo que me enfada es que usen la palabra como un insulto o como algo dañino para mi persona y mi trabajo. Es muy importante que, desde niños, los padres fomenten que el fútbol o el básquetbol lo pueden practicar una niña, porque a veces esos deportes son muy estereotipados al igual que el patinaje.

“Mi familia hizo un gran sacrificio. Además, hay muchas personas que me han dado un donativo para impulsar mi carrera, hemos organizado muchas colectas, otros me regalaron cosas para rifarlas y de ahí saco dinero para competir. Todo ha salido gracias a las personas que me han ayudado para poder seguir cumpliendo mis metas y estar en este deporte”.

—  Donovan Carrillo, patinador mexicano

El hombre detrás del éxito

Todo lo que ha logrado Carrillo ha sido por su esfuerzo. Sin embargo, detrás de ello está también el trabajo de Gregorio Núñez, el entrenador de Donovan.

El primer contacto del patinador mexicano fue en una pista ubicada en un centro comercial, en donde conoció a “Goyo”.

Y es que, Núñez era profesor de Iceland Guadalajara, comercio que tuvo que cerrar sus puertas en 2012.

Esto dejó sin chamba a Gregorio, quien veía en Carrillo un gran talento. Por tal motivo, el entrenador consiguió un empleo similar, pero en León, lo que obligó al pequeño Donovan a mudarse.

“Como entrenador tienes un sueño y, de alguna manera, cuando empiezas a dedicarte a algo por lo que tú también luchaste un tiempo, en una etapa de tu vida, buscas dar lo mejor de ti, porque es algo que también en su momento tú soñaste vivir.

“Quizá, yo como deportista no se acomodaron las circunstancias para lograr ciertos sueños, pero el deseo seguía allí, nada más mutó un poco a decir: ‘quiero ayudar a que alguien realice ese anhelo que también tuve’”.

—  Gregorio Núñez, entrenador de Donovan

La dupla hoy está en la Final de los Juegos Olímpicos de Beijing 2022, escribiendo un capítulo más en la historia del deporte mexicano.