El Clausura 2022 no arrancó de la mejor manera para el Club América. La crisis en Coapa es tan evidente que, incluso, Santiago Solari se juega su puesto el próximo sábado en el Clásico Capitalino ante Pumas.
Luego de seis jornadas, las Águilas solo han conseguido una victoria, pero lo más preocupante es que tienen 4 derrotas, consiguiendo solo la victoria ante Santos Laguna en la fecha cinco.
Cuatro puntos de 18 posibles son los que tienen al América en el lugar 16 de la tabla y su derrota ante Pachuca fue histórica, pues los azulcremas nunca habían perdido sus primeros tres partidos del torneo como locales, algo que ya sucedió en la era Solari.
La crisis de juego en América podría ser por varias razones. El Estadio Azteca ya no pesa y el club ha dejado de ser invencible como local, lo cual ha provocado que la afición poco a poco deje de asistir al inmueble.
Lesiones
Las lesiones que ha tenido el club se han convertido en un problema para Solari, pues en las primeras jornadas ha prescindido de jugadores como Jorge Sánchez, Sebastián Cáceres, el canterano Emilio Lara y Pedro Aquino, que parece ser la baja más sensible del club, pues América no ha encontrado solidez en el medio campo.
Expulsiones
Aunado a las bajas por lesión, las expulsiones de Roger Martínez, Miguel Layún y Federico Viñas, han dejado un plantel sin muchas variantes para que el técnico pueda maniobrar en su once titular.
Mano dura
La mayoría de las expulsiones y tarjetas amarillas que ha tenido el América en este torneo han sido de forma imprudente, por lo que hace falta que el técnico o el presidente deportivo del club, impongan medidas más severas para evitar que sus jugadores pierdan el control dentro del terreno de juego.
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Adaptación de los refuerzos
Las bajas por lesión y expulsiones se han presentado como una oportunidad para que los refuerzos puedan mostrar su calidad; sin embargo, no han rendido como se esperaba, siendo hasta ahora Diego Valdés el más rescatable de las nuevas caras en el club y el más utilizado por Solari.
Sistema de juego
Las multiples bajas han provocado que Solari tenga que improvisar en su sistema, donde a veces se le ha visto jugar con línea de 3, 4 o hasta 5 en la defensa. Además de probar constantemente a jugadores como Salvador Reyes en diferentes posiciones a las que normalmente juegan. Incluso, se habla que esa fue una de las razones por las que Sebastián Córdova salió del nido.
El próximo sábado será la última oportunidad para que Santiago Solari muestre una cara diferente en América y el club comienza a despuntar. En caso de otra derrota, es muy probable que el argentino deje de ser técnico de equipo y las Águilas ya comienzan a sondear a su sucesor, pues se habla de que podría llegar Nicolás Larcamón el próximo verano si las cosas no mejoran.
