Acapulco es su segunda casa. Rafael Nadal volvió a mostrar que es el amo del Abierto Mexicano de Tenis y conquistó su cuarto título en la historia, al vencer en una gran final al sorpresivo británico Cameron Norrie por 6-4 y 6-4 en poco más de una hora y 54 minutos.
Una semana de grandes duelos en la nueva Arena GNP no podía culminar de otra forma que, con un encuentro de alarido entre el veterano español, que se presentó como el campeón de Australia y una racha invicta de 14 duelos, y una estrella en ascenso. El primer set fue un duelo de velocidad y buen golpeo a la pelota, en donde ambos tenistas zurdos mostraron un duelo intenso a la corta y larga distancia.
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La oportunidad de Norrie de dar una nueva campanada fue en este capítulo, en donde se llegó a ir hasta por dos juegos arriba. Pero la Fiera mostró que, a pesar del cansancio, sabe dominar una cancha como la de Acapulco y le dio la vuelta al británico de 26 años, que pelea por meterse en el top 10 mundial.
Tanto la presión del público, la presencia del histórico rival y el clima de Guerrero comenzaron a atacar a Norrie en el segundo set, y terminó destrozando una raqueta tras el reclamo de un punto a la jueza de silla.
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Con puntos largos y buenas decisiones por parte del originario de Manacor, el segundo set fue una batalla que fue dominada por el máximo ganador de Grand Slams en la historia, mientras que Norrie que se plantó bien a pesar de un segundo reclamo, pero mostró un gran nivel en la nueva casa del AMT.
Ahora Nadal coloca su nombre con letras de oro en el Abierto Mexicano de Tenis al conquistar su cuarto guaje de plata, igualando a su compatriota David Ferrer (2010-2012 y 2015), y al austriaco Thomas Muster (1993-1996).
Tsitisipas triunfa en dobles
Por otra parte, una de las figuras del Abierto, el griego Stéfanos Tsitsipás consiguió el título en dobles junto al español Feliciano López al vencer en dos sets al dúo formado por el salvadoreño Marcelo Arevalo y el holandés Jean-Julien Rojer por 7-5 y 6-4 en una hora y 33 minutos
