La Fórmula 1 está de regreso en Arabia Saudita, un año después de que un misil impactó al depósito de petróleo cerca del circuito durante la semana de carrera, aunque los pilotos expresaron su confianza con la seguridad, el británico Lewis Hamilton habló respecto al tema de derechos humanos en el país.
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“La cosa es que si no estoy aquí, la Fórmula 1 continuará sin mí. Cuando vamos a lugares distintos creo que el deporte tiene la obligación de visibilizar los problemas”, comentó el heptacampeón. “Está abierto a interpretación. Esperemos que todos tengan un fin de semana seguro”, agregó Hamilton al preguntarle si estaba feliz de participar en el GP.
El año pasado la carrera estuvo cerca de ser cancelada después de que rebeldes Houthi de Yemen explotaron un depósito a 11 kilómetros de la sesión de prácticas. El suceso llevó a horas de conversaciones entre los pilotos, organizadores y socios. El incidente tuvo lugar después de que 81 personas fueron ejecutadas de forma masiva en Arabia Saudita.
El país árabe es acusado de usar al deporte para limpiar su imagen con respecto a los abusos de derechos humanos, también incluyen a Bahrein, que realizó la primera carrera de la F1 y Qatar que organizó la Copa Mundial el año pasado y también es sede de una Gran Premio de la F1.
