Sergio Pérez tuvo una clasificación de pesadilla en el Gran Premio de Australia, después de tener un problema con su RB 19 que le impidió avanzar a la Q2.
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El mexicano, salió al circuito Albert Park y apenas en la tercera curva de la primera vuelta, presentó problemas con los frenos y se fue directo a la grava, por lo que tuvo que abandonar la carrera.
De esta manera, el jalisciense no pudo avanzar a la Q2 y largará desde la última posición en la carrera de este sábado.
Es importante mencionar que durante la última práctica, el mexicano presentó un problema similar, mismo que lo persiguió en la qualy y que le impidió posicionarse entre los primeros lugares para el tercer serial de la temporada.
