El piloto español Carlos Sainz impactó contra una tapa de alcantarilla suelta en la curva 10 del trazado, lo que provocó daños importantes en su monoplaza, por lo que la escudería decidió cambiar el chasis, el motor de combustión interna, la batería y la centralita del SF-23 de Sainz, lo que le obliga a cumplir con la sanción de 10 posiciones.
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La FIA consideró que, a pesar de que el daño fue causado por circunstancias externas, el reglamento de la Fórmula 1 obliga a aplicar la sanción.
“Los comisarios señalan que, si tuvieran la autoridad para conceder una derogación en lo que consideran en este caso circunstancias atenuantes, inusuales y desafortunadas, lo habrían hecho; pero las reglas no permiten llevar a cabo tal acción”, mencionaron en un comunicado.
Ferrari, por su parte, consideró que la sanción es injusta y que perjudica al equipo, “No, esto es inaceptable; el show es una cosa y la parte deportiva es otra”, dijo Fred Vasseur, director de la escudería italiana.
“Está bien, el espectáculo es el espectáculo y todo va bien, pero creo que hoy en día es inaceptable para la F1 y esto nos va a costar una fortuna”, agregó. La sanción de Sainz podría ser determinante en la carrera del domingo, ya que el piloto español es uno de los favoritos para la victoria.